Editor Freddy Medrano
SAN SALVADOR, El Salvador (Tomado de AP) — Al menos 3.332 personas han muerto de forma violenta en los primeros siete meses del año y la violencia se ha recrudecido en los primeros 11 días de agosto un promedio de 24,6 diarios, informó el miércoles el estatal Instituto de Medicina Legal.
El director de Medicina Legal, el médico psiquiatra Miguel Fortín Magaña, señaló que la cifra de muertes violentas en los primeros siete meses del año se acerca a los 3.912 homicidios registrados en todo el año 2014.
Según el funcionario de continuar con estas cifras de homicidios diarios, es probable que 2015 cierre como uno de los años más violentos.
Fortín Magaña informó que solo en los primeros 11 días de agosto, han contabilizado 271 homicidios, con un promedio de 24,6 muertes violentas al día y señaló que solo el día lunes 10 de agosto hubo 37 asesinatos convirtiéndose en el segundo día más violento del año desde el uno de junio cuando se registraron 38.
En julio se reportaron 467 homicidios, de estos 422 fueron hombre y 43 mujeres, con un promedio de 15 homicidios al día. De las 467 personas que murieron de forma violenta en julio, 55 eran menores de edad.
Según las estadísticas oficiales del Instituto, junio ha sido el mes más violento de 2015 con 677 homicidios, mientras que en febrero se contabilizaron 307.
Según los registros de Medicina Legal, en enero se registraron 336 homicidios, en febrero 307, en marzo 484; en abril 418; en mayo 643; en junio 677; y en julio 467.
En marzo de 2012 las pandillas anunciaron una tregua sólo para detener los homicidios. La sangrienta guerra que libraban en las calles se suavizó pero propició consecuencias no del todo esperadas: el pacto les dio oxígeno para centrarse en consolidar sus áreas de influencia y su poder, según los detractores del pacto.
Desde que la tregua se rompió en septiembre de 2013 los homicidios fueron en aumento: el promedio de 24,6 diarios se compara con los seis que si se compara a los seis que se registraban durante la vigencia del acuerdo. Un 60% de las víctimas son miembros de estas estructuras criminales.
