Redacción Internacional.- El expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, está convencido de que si gana las elecciones podrá volver a Cataluña, tomar posesión de su cargo como presidente y quedarse en Cataluña. Una posibilidad más compleja teniendo en cuenta que en el momento en que pise suelo español sería detenido, llevado ante el juez para declarar y, muy probablemente, encarcelado de manera preventiva, como Oriol Junqueras, Joaquim Forn y ‘los Jordis’. Sólo un minuto antes de esta declaración, Puigdemont aseguraba que tenía previsto pasar las Navidades en Bélgica y que esperaba que pudiera ir a visitarle su familia.
Asimismo, Puigdemont ha dicho ser falsos los rumores publicados que apuntaban a que tenía previsto hacer acto de presencia en Cataluña justo antes de los comicios para dar un golpe de efecto a la campaña electoral. Por el contrario, ha sostenido la idea de que si gana los comicios, esa victoria debería servir para dejar sin efecto las acusaciones contra él, contra su gobierno, contra los líderes de las entidades soberanistas, así como para levantar las medidas del 155 implantadas por el Gobierno.
“Creo, y debería creerlo cualquier demócrata, que si gano las elecciones podré tomar posesión del cargo y quedarme en Cataluña, y que mi gobierno y ‘los Jordis’ saldrán de la cárcel”, ha dicho. Y lo ha argumentado al considerar que “lo que se diga en las elecciones no puede ser que no se aplique”. Para Puigdemont, “esta sería la mejor noticia para la democracia española” porque “las mismas ideas que te pueden llevar a presidir la Generalitat no te pueden llevar a la cárcel”. Y es que si después del 21-D, las cosas son más o menos le que había tal como las quieren los catalanes, se habrá hecho evidente que la receta Rajoy, que es el 155, no soluciona nada”.
Puigdemont ha recordado que estas medidas son las que están incluidas en el programa electoral de JxCat: “Pedimos en nuestro programa precisamente esto porque no hay causa”, ha insistido. Pero el líder catalán no tiene previsto pedir asilo político en Bélgica y ha reiterado que está allí “para defender mis derechos”, por lo que “nunca he sido fugado” y “he estado aquí dando la cara en la justicia europea defendiendo la legitimidad y continuidad de las instituciones que represento”.
Por La Vanguardia
