Los precios del petróleo se estabilizaban el martes, pues el aumento de tensión entre Estados Unidos e Irán elevó los riesgos del suministro, mientras que la escalada de las disputas comerciales aumentó las perspectivas de una desaceleración del crecimiento económico y de una menor demanda energética.
El crudo Brent aumentó 0.23 dólares, o 0.31 por ciento, a 73.29 dólares el barril, mientras que el petróleo ligero estadounidense, West Texas Intermediate (WTI)avanzaba 0.48 dólares, o 0.72 por ciento, a 68.38 dólares el barril.
Ambos referenciales han caído durante julio, ante el incremento de la oferta de Rusia, Arabia Saudita y otros miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y el descenso de las interrupciones imprevistas de producción.
La confianza del mercado ha estado movida por preocupaciones geopolíticas, entre temores a interrupciones en el suministro por las confrontaciones en Oriente Medio o los efectos que podrían tener las disputas comerciales de Washington con sus principales socios comerciales en el crecimiento global.
Irán es el tercer mayor productor de la OPEP, con un bombeo de 3.75 millones de barriles por día. Actualmente, está sujeto a una creciente presión por parte del gobierno del presidente Donald Trump, que pretende que todos los países pongan fin a sus importaciones de crudo iraní a partir de noviembre.