Puerto Plata.- El procurador general de la República, Jean Rodríguez valoró el plan de humanización que ejecuta en las cárceles dominicanas, como un plan ambicioso y retador, al que está dedicado en cuerpo y alma, porque es lo correcto, lo humano y lo inteligente.
El procurador dijo esas palabras al dejar el viernes iniciado los trabajos de construcción del Centro de Corrección y Rehabilitación de Puerto Plata, obra que es parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario Nacional, que lleva a cabo en todo el país.
El procurador Jean Rodríguez destacó la importancia que reviste la ejecución de este plan, para transformar de una vez y para siempre, el sistema carcelario del país, el cual lleva décadas en un estado de hacinamiento y violación a la dignidad de los internos que guardan prisión en las cárceles del país.
El procurador general de la República Al dirigirse a los ciudadanos y ciudadanas de Puerto Plata, el procurador Jean Rodríguez, explicó que es lo correcto, porque ni la Constitución ni las leyes indican que un privado de libertad deba ser maltratado o humillado, en ese sentido, dijo que las sentencias no condenan a dormir en el piso, a enfermarse por tuberculosis o a pasar hambre.
De igual manera, dijo que es lo humano, porque el respeto a la dignidad de un solo individuo es el respeto a la dignidad de todos y es inteligente, porque no solo se combate el crimen fuera de las cárceles, sino también dentro de ellas.
“Si no corregimos este círculo vicioso, ese delincuente, cuando sea libre, puede estafar, asaltar, violar o asesinar a cualquiera de nosotros, nuestros familiares o amigos. En algún momento saldrá y en algún momento coincidirá con nosotros y ninguno queremos ni debemos sentir temor o inseguridad si podemos prevenirlo”, expresó.
Explicó, que para cambiar esa terrible realidad, está ampliando este centro de corrección y rehabilitación mediante la construcción de un nuevo edificio con 144 espacios adicionales para recibir a los privados de libertad de esta provincia, lo que ayudará a acortar la duración de los procesos, a evitar traslados costosos e innecesarios para el Estado y a mantener al interno cerca de sus familiares para beneficio de su rehabilitación y posterior reinserción en la sociedad.
Además de la parte física, en este proyecto de Humanización del sistema se trabaja en la modificación del protocolo penitenciario, estructurando un programa integral donde la salud física y mental vayan de la mano con la formación básica, profesional, técnica y espiritual del interno.
