Artículos

Oye Multitud – Ideología de Género una ideología para extinguir la familia

FB IMG 1516934414505 1 2 e1542031627596
FB IMG 1516934414505 1 2 e1542031627596
Por Dra. Claudia Hernandez

La  ideología de genero es una ideología  es un sistema de pensamiento cerrado que defiende que las diferencias entre el hombre y la mujer, a pesar de las obvias diferencias anatómicas, no corresponden a una naturaleza fija, sino que son unas construcciones meramente culturales y convencionales, hechas según los roles y estereotipos que cada sociedad asigna a los sexos.

Se ha difundido desde muchos ámbitos de poder, y desde muchas universidades norteamericanas se ha intentado dar, desde los años 60, a los estudios de género un rango científico y ha tenido como plataforma de lanzamiento la Conferencia Mundial de Naciones Unidas.

Esta ideología está presente en todas las Agencias de las Naciones Unidas desde los años 90: en concreto, en el Fondo para la Población, UNICEF, UNESCO y OMS que han elaborado muchos documentos con categorías propias de esta ideología.

Desde las Naciones Unidas pasó a la Unión Europea, donde se difunde por medio de los medios de comunicación y en colegios, en concreto, por medio de actividades lúdicas: fiestas, celebraciones, etc., en las que se intenta que todos participen.

Para  la ideología de género el término sexo hace referencia a la naturaleza, e implica dos posibilidades –varón, mujer-, que son las únicas posibilidades derivadas de la dicotomía sexual biológica…

…mientras que el término género procede de la lingüística y permite tres variaciones: masculino, femenino, neutro, y mucha más imaginación.

No utilizan el termino hombre o mujer porque el gran enemigo, para la ideología de género, es la diferencia hombre-mujer.
Esta ideología afirma que no existen sexos; sólo roles, orientaciones sexuales mudantes, que se pueden cambiar en la vida todas las veces que se quieran.

Los defensores de la ideología de género sostienen que no existe una naturaleza humana, que haga a unos seres humanos varones y a otros seres, mujeres.

Los ideólogos de género afirman esto:

«Cada niño se asigna a una u otra categoría en base a la forma y tamaño de sus órganos genitales. Una vez hecha esta asignación nos convertimos en lo que la cultura piensa que cada uno es -femenino o masculino-.

Aunque muchos crean que el hombre y la mujer son una expresión natural de un plano genético, el género es producto de la cultura y del pensamiento humano, una construcción social que crea la verdadera naturaleza de todo individuo.»

Esta ideología propone la búsqueda de la “liberación total” del hombre en todos los órdenes, tras la de-construcción del lenguaje, de las relaciones familiares, de la reproducción, de la sexualidad, de la educación, de la religión, de la cultura, de la religión, de Cristo, etc.
Cuando el hombre se libere de todo eso -dicen- será libre.

Para entender la ideología de género hay que prepararse para dar un salto mental.
No hay que confundir esta ideología con el lenguaje que utiliza, tomado del feminismo radical.
Los ideólogos de género no son feministas: sólo utilizan su lenguaje.

Esta ideología se presento al mundo en 1995, en la IV Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre la Mujer, que tuvo lugar en Pekín.
Hubo una acción muy activa en esa Cumbre Mundial por parte de los defensores de esta ideología.
Muchos países les apoyaron porque creyeron que se trataba de una lucha a favor de los derechos de la mujer.

Utilizaron la estrategia de Difundir entre los delegados de la Conferencia de Pekín unos textos con las definiciones de sexualmente polimorfo, homofobia, etc. En esos textos se evitaba las palabras marido, mujer, esposa, padre, etc.

Ante las reservas de algunos países ante esta ideología, hubo una reacción airada de Bella Abzug, de Estados Unidos, defensora de esta ideología, que explicó el término «género»: “El sentido del término género -dijo- ha evolucionado, diferenciándose de la palabra sexo para expresar la realidad de que la situación y los roles de la mujer y del hombre son construcciones sociales sujetas a cambios”.
Para conseguir su objetivo utilizó un discurso feminista radical, meramente táctico:
«El concepto de género -dijo- está enclavado en el discurso social, político y legal contemporáneo… los intentos actuales de varios Estados Miembros de borrar el término género en la Plataforma de Acción y reemplazarlo por sexo es una tentativa insultante y degradante de revocar los logros de las mujeres, de intimidarnos y de bloquear el progreso futuro».
La Cumbre de Pekin concluyo entre la perplejidad de los asistentes, los defensores de esta ideología consiguieron que se aceptase el concepto de género, y la Cumbre emitió  la siguiente definición:
«El género se refiere a las relaciones entre mujeres y hombres basadas en roles definidos socialmente, que se asignan a uno u otro sexo».
Los generos que  hay para la ideología de género depende según los autores.
Algunos autores de la ideología de género afirman que hay diversas formas de sexualidad -heterosexual masculino, heterosexual femenino, homosexual, lesbiana, bisexual e indiferenciado- que son equivalentes a la heterosexualidad.
Se habla de «cinco géneros» o «cinco sexos». Otros no hablan de ninguno, ya que se trata de llegar a una situación sin «sexos fijos», donde cada uno pueda elegir a su gusto, por el tiempo que quiera, el «rol» que más le guste.
Defienden que cualquier tipo de unión y cualquier actividad sexual es justificable, porque abren un panorama “imaginativo”.
Proponen que la heterosexualidad sea sólo un caso más de práctica sexual, tan válida como cualquier otra.

Defienden que cada persona debe elegir libremente el género al que le gusta pertenecer según los momentos y etapas de la vida: ahora tengo el rol hetero, ahora tengo el rol bisexual; ahora, el homosexual, etc.

Las feministas de género pretenden que se sustituyan estos términos «género-específicos» por palabras «género-neutrales», y aspiran a que no haya diferencias de conducta ni responsabilidad entre el hombre y la mujer en la familia.

Entienden por «familia» cualquier agrupación humana.

Por eso, los cambios terminológicos son tan importantes para la ideología de género: el término “pareja”, sirve para todo.

La ideología de género quiere quitar a la familia cualquier estructura (padres hijos) para cambiarla por cualquier solución “imaginativa”.

 Roles de las ocupaciones o profesiones.

El tercer tipo de «roles socialmente construidos» que la ideología de género quiere deconstruir son las ocupaciones que una sociedad asigna a uno u otro sexo.

Pero la ideología de género no batalla por la equiparación de la mujer -como hace el feminismo-, sino que lucha para que no haya distinción de sexos, que es algo distinto.

No pretende que cualquier hombre o cualquier mujer pueda alcanzar un trabajo y ser remunerado igual (que son las conquistas del feminismo de igualdad), sino que desaparezcan las categorías “hombre” y “mujer”.

La ideología de género es un sistema cerrado contra el cual no hay forma de argumentar, ni de establecer un díalogo.

No puede apelarse a la naturaleza humana, porque no creen en ella.

No puede apelarse a la experiencia cotidiana (por ejemplo al ver como los niños y las niñas pequeñas presentan diferencias naturales y se manifiestan y acual de modo distinto) porque dicen que toda esa experiencia está manipulada. Y punto.

No puede apelarse a las opiniones y deseos de las mujeres actuales, que ven como la lucha feminista ha logrado muchas conquistas de igualdad, porque según esta ideología esas mujeres esas mujeres están alienadas, ya que realmente lo que importa para un ideólogo de género no es que la mujer tenga los mismos derechos que el hombre, sino que no existan ni hombres ni mujeres.

Para las «feministas de género» todo es «socialmente construido», desde la familia a la religión, y por lo tanto, hay que de-construirlo todo.

 La ideología de género quiere de-construir todo lo religioso
Porque piensan que la «de-construcción» de la religión es el medio imprescindible para llegar a la sociedad sin sexos que proponen.

Esta ideología considera la religión como un simple un invento humano y sostiene que las religiones principales fueron inventadas por los hombres para oprimir a las mujeres. (Esa es la tesis central de “El Código da Vinci”).

Toda propuesta religiosa ajena a la ideología de género se tacha de fundamentalista.

Para esto intentan de-construir la figura de Cristo, diciendo que es una pura construcción histórica, sin base real.

La ideología de género plantea “otras vías de reproducción”: le gustaría que los heterosexuales se uniesen de vez en cuando para algún encuentro. De esa forma -dicen- irían naciendo seres que irían adoptando imaginativamente, el sexo que deseasen y adoptando los roles que quisieran.

“La forma en que se propaga la especie es determinada socialmente.

Si biológicamente la gente es sexualmente polimorfa y la sociedad estuviera organizada de modo que se permitiera por igual toda forma de expresión sexual, la reproducción sería resultado sólo de algunos encuentros sexuales: los heterosexuales”.

Para esta ideóloga de género la culpa de la situación actual la tienen los sexos:

«La división estricta del trabajo por sexos, un invento social común a toda sociedad conocida, crea dos géneros muy separados y la necesidad de que el hombre y la mujer se junten por razones económicas.

Se contribuye así a orientar sus exigencias sexuales hacia la realización heterosexual, y a asegurar la reproducción biológica.

En sociedades más imaginativas, la reproducción biológica podría asegurarse con otras técnicas.»

Dentro de esta ideología, el término libre elección de reproducción es la expresión clave para referirse al aborto.

El térmimo estilo de vida puede significar muchas cosas: homosexualidad, lesbianismo y todo tipo de sexualidad fuera del matrimonio.

TRA Digital

GRATIS
VER