SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La Procuraduría General de la República (PGR) aclaró este martes que la Yipeta confiscada en Jimaní, provincia Independencia, nunca estuvo en su poder.
Aseguró que se trata de dos vehículos distintos del mismo imputado, uno regular y otro blindado, este último ocupado el pasado 7 de diciembre por miembros del Ejército Nacional, en virtud de una alerta de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) sobre los bienes del imputado José Bernabé Quiterio.
En un comunicado recuerda que el pasado 20 de agosto, día en que fue desmantelada la red que dirigía el narcotraficante César Emilio Peralta, alias César el Abusador, mediante allanamiento a la residencia de Bernabé Quiterio, ocupó el vehículo de su propiedad, no blindado, marca Lexus, modelo LX570, color blanco, año 2016, placa G356066, chasis JTJHY00W7G4190797.
La institución explica que en la continuación de las investigaciones y en virtud de que no fueron ocupados en su residencia los demás vehículos que figuran a su nombre, el Ministerio Público procedió en fecha 27 de agosto de 2019 a solicitar a la DGII hacer una oposición a venta y traspaso sobre dichos vehículos, entre estos el vehículo blindado marca Lexus, modelo LX570, color blanco, año 2016, placa G353903, chasis JTJHY7AX9G4186699, detenido en Jimaní.
Detalla que en fecha 7 de diciembre de 2019, en atención a esa oposición, les fue notificado por parte de miembros del J-2 del Ejercito Dominicano, que el vehículo blindado marca Lexus, modelo LX570, blanco, año 2016, placa G353903, chasis JTJHY7AX9G4186699, en el que transitaba una cónsul haitiana con sede en Santiago, fue confiscado por existir una alerta sobre los bienes del imputado José Bernabé Quiterio.
El órgano persecutor de la actividad delictiva afirma que dicho vehículo blindado, retenido en Jimaní, nunca estuvo en su poder hasta que fue ocupado el pasado sábado por miembros del J-2 del Ejercito Dominicano.
Indicó que Bernabé Quiterio cumple prisión preventiva en la Penitenciaría Nacional de La Victoria por su vinculación a las acciones ilícitas de la red dedicada al lavado de activos producto del narcotráfico que dirigía César Emilio Peralta, alias César el Abusador.
