(Clarín.com /Mundo).-El número de muertes en China por la epidemia del nuevo coronavirus alcanzó este martes la cifra de 1.011 en todo el país, después del anuncio de 103 nuevos decesos en la provincia de Hubei, informaron las autoridades.
El presidente chino Xi Jinping admitió que la situación es muy grave.
La comisión de salud de Hubei confirmó también otros 2.097 nuevos casos de infección en esta provincia del centro de China, en cuya capital Wuhan surgió el brote en diciembre.
Ahora hay más de 42.200 casos confirmados en China, según cifras publicadas previamente por el gobierno. Se cree que el nuevo virus surgió el año pasado en un mercado que vende animales salvajes en Wuhan.
El brote se inició en Wuhan, una ciudad situada en la provincia china de Hubei, concretamente en un enorme mercado de venta de animales salvajes. EFE/EPA/JEROME FAVRE
El presidente chino, Xi Jinping, se reunió con personal sanitario y pacientes afectados en un hospital en Pekín el lunes, donde pidió «más medidas decisivas» para contener la epidemia, informó la cadena estatal CCTV.
Un equipo de expertos internacionales de la Organización Mundial de la Salud llegó a China el lunes por la noche, dirigido por Bruce Aylward. Este supervisó la respuesta de la organización en 2014-2016 a la epidemia de ébola en el oeste de África.
Antes de la llegada del equipo, el jefe del a OMS Tedros Adhanom Ghebreyesus advirtió que hubo «ejemplos preocupantes» de casos en el extranjero en personas que habían viajado a China.
Los síntomas comienzan con fiebre, seguida de tos seca y luego, después de una semana, llega la falta de aliento y algunos pacientes necesitan tratamiento hospitalario.
Según la OMS, los datos de 17.000 pacientes sugieren que el 82% desarrolla una enfermedad leve, esta se agrava para el 15% y alcanza un nivel crítico para el 3%.
En particular, esta infección rara vez parece causar secreción nasal o estornudos. La familia del coronavirus en sí misma puede provocar síntomas que van desde un resfrío leve hasta problemas pulmonares graves que pueden llevar a la muerte, como una neumonía.