Santo Domingo, República Dominicana.- El Gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, anunció este miércoles una serie de medidas monetarias, financieras y cambiarias, ante el impacto del COVID-19, en la economía dominicana
Durante una rueda de prensa en la sede de la entidad financiera, el Gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, anunció la reducción de la tasa de interés en el mercado financiero y proveer liquidez a los bancos, tanto en moneda nacional como extranjeras y flexibilizar transitoriamente las normas prudenciales del sector financiero.
También fue reducida la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 100 puntos básicos, de 4.50 % a 3.50% anual, con el objetivo de incentivar una baja generalizada de las tasas de interés en el sistema financiero a través del mecanismo de transmisión de política monetaria.
El documento inextenso suministrado por el Banco Central con las medidas adoptadas….
En primer lugar, quiero agradecer la presencia de la prensa radial, escrita y televisiva, así como de los medios de comunicación digitales, que gentilmente han acogido nuestra invitación a esta rueda de prensa. Igualmente, aprovecho la ocasión para agradecer la presencia y el apoyo del Ministro de Hacienda, Licenciado Donald Guerrero y del Superintendente de Bancos, Licenciado Luis Armando Asunción, así como de los miembros de la Honorable Junta Monetaria, Manuel García Arévalo, Cesar Nicolás Penson, George Manuel Hazoury y Ricardo Rojas León.
Permítanme informar al país, a través de este encuentro con distintos sectores de la prensa, la adopción de una serie de medidas orientadas a garantizar el buen funcionamiento de la economía dominicana en un entorno internacional complejo, caracterizado por un alto nivel de incertidumbre, como resultado de la expansión del coronavirus que afecta a unos 160 países en el mundo.
En este contexto y como mencionó el Señor Presidente Danilo Medina Sánchez, en su alocución al país en la noche de ayer, la Junta Monetaria y el Banco Central han adoptado un conjunto de medidas tendentes a reducir las tasas de interés en el mercado financiero, a proveer liquidez a las entidades bancarias, tanto en moneda nacional como en moneda extranjera, y a flexibilizar transitoriamente las normas prudenciales del sector financiero.
Estamos convencidos de que estas medidas impactarán positivamente y de forma inmediata a la actividad económica, favoreciendo a los hogares dominicanos, a las micro, pequeñas y medianas empresas y al sector privado en general. Asimismo, crearán las condiciones para que los deudores que enfrenten problemas por las condiciones de crisis imperantes como resultado de la expansión del COVID-19, puedan hacer frente a sus compromisos de pago.
Medidas de tasas de interés
En primer lugar, quiero anunciarles que, el Comité de Operaciones de Mercado Abierto (COMA) del Banco Central de la República Dominicana, en una reunión extraordinaria de política monetaria celebrada el pasado lunes 16 de marzo, decidió:
1. Reducir la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 100 puntos básicos, de 4.50 % a 3.50% anual, con el objetivo de incentivar una baja generalizada de las tasas de interés en el sistema financiero a través del mecanismo de transmisión de política monetaria.
2. De igual forma y con la finalidad de proveer liquidez a un costo bajo a las entidades financieras, se aprobó una disminución de 150 puntos básicos en la tasa de interés de la facilidad permanente de expansión de liquidez (Repos a un día), pasando de 6.00 % a 4.50% anual.
3. Adicionalmente, se decidió reducir la tasa de interés de depósitos remunerados de corto plazo en el Banco Central (Overnight), de 3.00 % a 2.50% anual. Esta medida contribuye a reducir la tasa de interés interbancaria y, por lo tanto, disminuye el costo de fondeo de las entidades financieras.
Medidas de provisión de liquidez al sistema financiero
En adición a los recortes de tasas de interés, se adoptaron una serie de medidas de provisión de liquidez, tanto en moneda nacional como en moneda extranjera, con el objetivo de poner a disposición de las entidades financieras una gran cantidad de recursos de manera tal que se pueda atender de forma efectiva la demanda de crédito de los sectores productivos y de los hogares dominicanos. Específicamente, en moneda nacional estamos poniendo a disposición de las entidades financieras liquidez por más de RD$52 mil millones a través de las siguientes medidas:
1. Primero, en reunión celebrada en el día de ayer, martes 17 de marzo, la Junta Monetaria flexibilizó los requisitos de cobertura del encaje legal en moneda nacional de las entidades financieras, reconociendo los títulos del Banco Central y del Ministerio de Hacienda como cobertura válida por un monto de hasta RD$22,321.0 millones, lo que representa 2.0 puntos porcentuales del coeficiente de encaje legal. De ese monto, RD$ 10 mil millones serán destinados a préstamos a los hogares y a las micro, pequeñas y medianas empresas y al sector comercio, mientras que el resto de los fondos, unos RD$ 12,321.0 millones serán canalizados a los sectores productivos, principalmente al turismo y al sector exportador, a tasas de interés en todos los casos no mayores de 8.0 % anual.
Es importante destacar que los nuevos préstamos que otorguen las entidades financieras con estos recursos serán clasificados como categoría de riesgo A, con cero provisiones, y no serán considerados en el cálculo del índice de solvencia.
2. Segundo, el Banco Central habilitó la ventanilla de provisión de liquidez a las entidades financieras a través del mecanismo de Repos hasta 90 días por un monto de hasta RD$30 mil millones, utilizando como garantía títulos del Banco Central y del Ministerio de Hacienda. Esta facilidad estaría a disposición de las entidades financieras con tasas de interés de 4.75% para Repos de hasta 30 días y de 5.0% para Repos entre 31 y 90 días. Estas facilidades podrían renovarse mientras persistan las condiciones de incertidumbre que originaron la medida.
En cuanto a la provisión de liquidez en moneda extranjera, hemos aprobado dos medidas que permiten garantizar un flujo adecuado de dólares para cubrir las necesidades del mercado cambiario, en un momento en que grandes sectores generadores de divisas como el turismo y el sector exportador se están viendo afectados. En ese sentido estamos proveyendo liquidez al mercado por más de US$ 500 millones, a través de los siguientes mecanismos:
1. Inyectar liquidez en moneda extranjera por un monto de hasta US$300.0 millones, a través de operaciones de repos de 90 días, utilizando como garantía títulos del Ministerio de Hacienda.
2. Flexibilizar temporalmente los requisitos de cobertura del encaje legal en moneda extranjera de los bancos múltiples, reconociendo títulos del Ministerio de Hacienda en dólares como cobertura válida de US$ 222 millones, lo que representa 2.5 puntos porcentuales del coeficiente de encaje legal. Esta medida contribuirá a facilitar la canalización de divisas a sectores generadores como el turismo y las exportaciones que han sido impactados por la caída en los flujos de comercio y turismo a nivel global.
Medidas de tratamiento regulatorio especial al sistema financiero
En su reunión del día de ayer, la Junta Monetaria aprobó además una serie de medidas que implican un tratamiento regulatorio especial al sistema financiero mientras perdure la incertidumbre global, asociada a los efectos económicos provocados por la pandemia del coronavirus. Dicho tratamiento especial, permitiría reajustar el cronograma de pagos de los deudores bancarios en caso de que fuese necesario, sin que se deriven por esta acción costos regulatorios adicionales. Con estas medidas se busca evitar un posible deterioro de la cartera de crédito a causa del impacto del COVID-19 en el desempeño de algunas actividades productivas.
Específicamente, las medidas adoptadas como parte del tratamiento regulatorio especial son:
1. Autorizar a las entidades financieras a congelar las calificaciones y provisiones de los deudores al nivel en que se encuentran al momento de la aprobación de la Resolución.
2. Autorizar a que las reestructuraciones de créditos que impliquen modificación en las condiciones de pago, tasa de interés, plazos y cuotas, entre otros, puedan mantener la misma calificación de riesgo del deudor al momento de ser reestructurado. En otras palabras, esto quiere decir que no se le reduciría la calificación crediticia al deudor por problemas originados en atrasos de pagos producto de la situación actual.
3. Autorizar a que sean considerados como no vencidos aquellos préstamos desembolsados contra líneas de crédito por un período de sesenta (60) días. Esta medida comprende una dispensa del pago del capital del préstamo en ese período, beneficiando el flujo de caja del deudor.
4. Extender por noventa (90) días el plazo otorgado al deudor para la actualización de garantías correspondientes a las tasaciones. Esta medida brindará una mayor flexibilidad al deudor que dispondrá de más tiempo para cumplir con el requisito de actualizar su garantía.
Es importante destacar que esta situación adversa encuentra a la economía dominicana con fuertes fundamentos macroeconómicos, reflejados en un crecimiento en torno al potencial, inflación baja y estable, un crédito al sector privado dinámico y altos niveles de reservas internacionales, otorgándole al país una mayor capacidad de reacción para enfrentar los retos derivados de los efectos económicos del COVID-19.
En este contexto, las medidas preventivas por parte del Banco Central, la Junta Monetaria y el Gobierno Dominicano contribuirán a la estabilidad económica, dando seguridad y certidumbre a los agentes privados de forma tal que se mantenga un ambiente propicio para sostener el buen funcionamiento de la economía y preservar el aparato productivo dominicano.
El Banco Central de la República Dominicana y la Junta Monetaria reafirman su compromiso de conducir la política monetaria hacia el mantenimiento de la estabilidad macroeconómica y el buen funcionamiento de los sistemas financiero y de pagos. En ese sentido, la institución, así como todo el Gobierno Dominicano, se mantendrán dando seguimiento al impacto del coronavirus y a los demás factores de incertidumbre y sus efectos sobre la economía dominicana, encontrándose preparados para continuar reaccionando de forma oportuna ante factores que puedan generar un deterioro en el empleo y el bienestar de los dominicanos.