A continuación, el ranking de Bryan Hoch de los mejores cinco intermedistas en la historia de los Yankees.
1) Tony Lazzeri, 1926-37
Dato clave: Dueño del récord de la Liga Americana de más empujadas en un partido (11, el 24 de mayo de 1936)
Exaltado al Salón de la Fama póstumamente en 1991, Lazzeri fue un temible bateador que fungió como pieza clave junto a Babe Ruth y Lou Gehrig de aquellos famosos lineups de los Yankees. Lazzeri jugó con seis ediciones de los Bombarderos que ganaron el banderín de la Liga Americana durante sus 12 años vistiendo el uniforme a rayas, bateando .293/.379/.467 con 169 jonrones y 1,157 carreras empujadas.
Después de entregar el último out de la Serie Mundial de 1926, Lazzeri brilló en sus siguientes cinco Clásicos de Otoño, ayudando a que los Yankees a coronarse en cada ocasión gracias a un promedio de .291, slugging de .494 y cuatro cuadrangulares en 79 turnos. El 24 de mayo de 1936, Lazzeri se convirtió en el primer jugador de Grandes Ligas en dar dos grand slams en un encuentro, sumando 11 carreras impulsadas durante una paliza por 25-2 sobre los Atléticos. Todavía es líder de todos los tiempos entre los intermedistas de los Yankees en hits (1,784), triples (115), remolcadas, porcentaje de embasarse (.379) y wOBA (.387).
2) Willie Randolph, 1976-88
Dato clave: Encabeza a todos los camareros de los Yankees en fWAR (51.4)
Adquirido de los Piratas en diciembre de 1975, Randolph defendió el segundo saco durante las siguientes 13 temporadas, sirviendo como modelo de consistencia y paciencia durante un período turbulento en el que sus equipos eran conocidos como “el Zoológico del Bronx”. Convocado cinco veces al Juego de Estrellas durante su estadía con los Yankees, Randolph fue parte de dos equipos que ganaron la Serie Mundial (1977 y 1978) y cuatro que conquistaron el banderín de la Liga Americana.
Un excepcional defensor conocido por su habilidad para ejecutar los doble plays, Randolph bateó .275 y tuvo .374 de porcentaje de embasarse durante sus años en los Yankees. Ganó el Bate de Plata en la segunda base en 1980 tras batear .294 con 119 bases por bolas, líder en MLB. Homenajeado con una placa en el Parque de los Monumentos en el 2015, Randolph es el líder entre los intermedistas de los Yankees en partidos jugados (1,694), anotadas (1,027), boletos (1,005) y bases robadas (251).
3) Robinson Canó, 2005-13
Dato clave: Sus 375 dobles entre el 2005 y el 2013 fueron la mayor cantidad en las Grandes Ligas
Ascendido a las Mayores a los 22 años en mayo del 2005, el dominicano fue el segunda base de los Yankees durante nueve campaña, lapso en el que fue convocado cinco veces al Juego de Estrellas y se llevó cinco Bates de Plata y dos Guantes de Oro. Pieza clave de los Yankees que ganaron la Serie Mundial del 2009, Canó terminó cuatro veces entre los primeros seis en la votación para JMV de la Americana en sus años en el Bronx.
Aunque Canó parecía destinado a terminar su carrera con una placa en el Parque de los Monumentos, sus días en Nueva York terminaron durante la temporada muerta previa a la campaña del 2014, cuando firmó un contrato de 10 años y US$240 millones de los Marineros. Mientras estaba en Seattle durante la campaña del 2018, recibió una suspensión de 80 juegos tras dar positivo en una prueba antidopaje. Canó encabeza a todos los intermedistas de los Yankees en dobles, vuelacercas (204), promedio de bateo (.309), slugging (.504), OPS (.860) y wRC+ (126).
4) Joe Gordon, 1938-46
Dato clave: Primer segunda base de la Americana en dar 20 jonrones o más (25, en 1938)
Exaltado póstumamente al Salón de la Fama en el 2009, Gordon ganó cuatro anillos de Serie Mundial con los Yankees y se llevó el premio al JMV de la Liga Americana en 1942, superando a Ted Williams a pesar de que la estrella de los Medias Rojas se llevó la Triple Corona de bateo. Gordon fue al Juego de Estrellas en nueve de sus 11 temporadas y fue el primer camarero de la Americana en dar 20 cuadrangulares en una campaña, algo que hizo en siete ocasiones.
5) Bobby Richardson, 1955-66
Dato clave: Único jugador en ser nombrado JMV de la Serie Mundial, a pesar de estar en el equipo perdedor (1960)
Un tremendo defensor y excelente chocador de bolas que ganó cinco Guantes de Oro y fue convocado ocho veces al Juego de Estrellas, Richardson ganó tres Series Mundiales con los Bombarderos. Fue nombrado JMV del Clásico de Otoño de 1960, a pesar de que los Yankees cayeron ante los Piratas, tras haber bateado .367 (de 30-11) con un jonrón y 12 carreras empujadas en la serie decidida por el inolvidable vuelacercas de Bill Mazeroski en el Juego 7.