EFE
Con su imprescindible túnica de Hogwarts, su varita colgada en la cintura y unas notas brillantes, Emma Watson dio el salto internacional con su Hermione Granger en la saga de «Harry Potter». Pero lejos de estancarse, fue a la Universidad y llega a los 30 años convertida en una potente voz feminista.
A pesar de ello, la actriz reconoce llegar a la tercera década un poco estresada debido a todas las presiones sociales que conlleva cumplir esa edad: «Si aún no has construido un hogar, no te has casado, no tienes un bebé o aún estás descubriendo cosas por tu cuenta, no tienes nada seguro en una edad en la que se supone que ya deberías tenerlo. Esto genera ansiedad», sostuvo la actriz en una entrevista con la revista British Vogue.