Kigali, EFE.- La Justicia ruandesa arrestó este lunes bajo cargos de terrorismo y pertenencia a banda armada a Paul Rusesabagina, el exgerente del Hotel Des Milles Collines de Kigali, que inspiró la película “Hotel Ruanda” y salvó a centenares de personas durante el genocidio contra los tutsis de 1994.
“Rusesabagina es sospechoso de ser el fundador, líder, patrocinador y miembro de bandas violentas, armadas y extremistas”, explicó hoy Mulangira Thierry, portavoz de la Oficina de Investigaciones de Ruanda (RIB), quien le tiene en custodia en la comisaría de Remera, en la capital.
El que fuera gerente del hotel más famoso de Ruanda, que albergó a más de 1.000 tutsis y hutus durante el genocidio para salvarlos de los hutus extremistas, contaba con una orden de arresto internacional acusado de crímenes como asesinatos y secuestros de civiles ruandeses.
La Fiscalía ruandesa le acusa de pertenecer a “bandas terroristas” como la plataforma opositora Movimiento Ruandés por el Cambio Democrático (MRCD-Ubumwe), de la que fue fundador, y que cuenta con brazos militares que han atentado en territorio ruandés.
La labor de Rusesabagina en el hotel Mil Colinas inspiró la película “Hotel Ruanda” (2004), basada en la historia de este influyente hombre de negocios hutu, casado con una tutsi, que consiguió proteger en sus instalaciones de los militares y los genocidas a unas 1.200 personas.
En 2005, el expresidente estadounidense George Bush le otorgó la Medalla Presidencial a la Libertad por su labor y sus hechos heroicos.
Sin embargo, la asociación de víctimas del genocidio Ibuka asegura que su rol de salvador en el genocidio ruandés, en el que fueron asesinadas unas 800.000 personas en algo más de 100 días, ha sido exagerado.
La Fiscalía le acusó en 2010, junto a la líder opositora Victoire Ingabire, de financiar actividades terroristas y grupos armados. Por esos cargos, Ingabire, la principal enemiga política de Kagame, fue arrestada y condenada a 13 años de cárcel, hasta su puesta en libertad bajo indulto presidencial en septiembre de 2018.
En una entrevista con Efe en 2014, el opositor contaba que al principio apoyó al actual presidente, pero “el Gobierno de Kagame ha ido haciéndose menos democrático cada año. No hay ni poder compartido ni espacio político”.
“Creo que se ha convertido en un dictador millonario a quien le importa su propia fortuna, no los ruandeses”, explicaba entonces.