Más de 30 personas han fallecido a causa de los incendios forestales que están azotando varios estados de la costa oeste de Estados Unidos, según las autoridades del país.
Los incendios llevan tres semanas arrasando Oregón, California y Washington quemando millones de hectáreas y destruyendo miles de hogares.
Decenas de miles de personas se han visto obligadas a abandonar sus casas.
El candidato presidencial demócrata Joe Biden advirtió el sábado que «el cambio climático representa una amenaza existencial inminente para nuestra forma de vida» y acusó al presidente Donald Trump de negar «esa realidad».
Trump, quien se espera que visite California el lunes para ser informado sobre la situación, culpa a la mala gestión forestal de los incendios.
Según las autoridades, los fuegos han quemado hasta ahora un área equivalente al tamaño de Nueva Jersey.
La contaminación causada por el humo de los incendios ha dejado a la ciudad más grande de Oregón, Portland, con la peor calidad de aire del mundo, seguida de San Francisco y Seattle, según IQAir.com.
¿Qué está pasando en Oregón y Washington?
En Oregón, donde los bomberos luchan contra 16 grandes incendios, se declaró la orden deevacuar a 40.000 personas.
La Oficina de Manejo de Emergencias (OEM) de Oregón dice que los incendios han matado a 10 personas, pero las autoridades advierten que el número de muertos podría ser mucho mayor.
El jefe de bomberos de Oregón, Jim Walker, renunció el sábado, poco después de haber sido suspendido a raíz de una investigación personal.
A principios de esta semana, la gobernadora Kate Brown urgió a los propietarios a que se mantuvieran fuera de las zonas del incendio a pesar de los informes de saqueos.
«Permítanme asegurarles que tenemos a la Guardia Nacional de Oregón y la Policía Estatal de Oregón monitoreando la situación y previniendo saqueos», dijo Brown
Beatriz Gomez Bolanos, 41, relató a la agencia de noticias Reuters el duro viaje con su familia para escapar de las llamas, que podían ver a ambos lados del carro ella y sus cuatro hijos.
«Todo ha desaparecido. Tenemos que empezar de cero, pero estamos vivos», declaró.
Al menos un incendio en Oregón, el de Almeda, una localidad vecina de Portland, se cree que pudo haber sido provocado. Es uno de los más destructivos de la zona.
En el estado de Washington, los bomberos combaten 15 grandes fuegos. Un niño de un año murió a principios de esta semana mientras su familia intentaba escapar de las llamas. Sus padres están en estado crítico.
¿Y en California?
El gobernador Gavin Newsom inspeccionó el viernes los daños causados por el llamado Fuego del Complejo Norte (North Complex Fire), cerca de Oroville, en el norte de California.
«El debate sobre el cambio climático ha llegado a su fin», dijo a los periodistas. «Esta es una emergencia climática. Esto es real y está sucediendo».
Reconoció las fallas en el manejo forestal en las últimas décadas, pero agregó: «Ese es UN punto, pero no es EL punto».
Destacando el esfuerzo de los estados para combatir el cambio climático, dijo que las olas de calor récord y los incendios sin precedentes eran el tipo de problemas pronosticados por los científicos.
Trump argumentó que California podría prevenir incendios forestales si limpiara adecuadamente los suelos de los bosques.
«Tienen que limpiar sus bosques, hay muchos, muchos años de hojas y árboles rotos y son muy inflamables», dijo en un mitin el mes pasado. «Les he dicho esto durante tres años. Pero no quieren escuchar».
El Fuego del Complejo Norte, que lleva ardiendo desde el 18 de agosto, es uno de los más mortíferos de la historia. Hasta el momento se han encontrado 12 cadáveres y varias personas siguen desaparecidas.
En California se han registrado al menos 22 muertos por los incendios desde el 15 de agosto. Decenas de miles de personas tienen órdenes de evacuación, y 14.800 bomberos continúan combatiendo 28 grandes incendios en el estado.