EFE, MIAMI.- La tormenta tropical Nana amenaza con convertirse en un huracán este miércoles antes de llegar a las costas de Belice, lo contrario que la tormenta Omar, que se aleja de la costa este de EE.UU. y no supone amenaza alguna para tierra.
Nana se mueve hacia el oeste con vientos máximos sostenidos de 60 millas por hora (95 km/h) y a las 08.00 horas (12.00 GMT) se encontraba a unas 150 millas de Limón (Honduras) y a unas 350 millas (490 km) de Belize City, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
Toda la costa de Belice está bajo vigilancia de huracán y hay avisos de tormenta tropical para la península de Yucatán (México) y el norte de Honduras y las islas de la Bahía,
La tormenta se mueve a 18 millas por hora (30 km/h), pero reducirá su velocidad a lo largo del día, al contrario que los vientos, que se fortalecerán hasta alcanzar fuerza de huracán.
La trayectoria prevista por el NHC es que se acerquen a la costa norte de Honduras y luego a la de Belice, donde impactará.
Los vientos con fuerza de tormenta tropical se extienden hasta 70 millas (110 km) del centro de Nana.
Entre los efectos de Nana esta una “peligrosa” marejada ciclónica que elevará el nivel del mar hasta 5 pies (1,50 metros) por encima de la subida normal de la marea en la zona toque tierra y los alrededores acompañada de grandes olas.
Las lluvias de Nana van a afectar al norte del litoral hondureño, al sur y centro de Belice, al norte de Guatemala y la parte septentrional del estado de Chiapas y a la parte sur del estado de Quintana Roo, en México.
Nana se formó este lunes, al igual que Omar, que lo hizo frente a las costas de Carolina del Norte, de la que ya está lejos.
Omar se mueve hacia el este-noreste a unas 14 millas por hora (22 km/h) y va a seguir así hasta que vire al este esta tarde.
Los vientos máximos sostenidos de Omar están cercanos a las 40 millas por hora (65 km/h), pero se van a ir debilitando y es posible que de esta tormenta solo quede un remanente el jueves por la noche.
Además de Omar y Nana, este año se han formado en la cuenca atlántica otras trece tormentas tropicales con nombre, de las cuales cuatro han llegado a ser huracanes (Hanna, Isaías, Marco y Laura) y solo uno de ellos, Laura, ha sido mayor (de categoría 3, 4 o 5).