(EFE).-El creciente veto de los países occidentales a la compañía china Huawei, a la que Estados Unidos acusa de espiar para Pekín, está despejando el camino a los fabricantes nórdicos Nokia y Ericsson hacia la hegemonía global en el mercado de la telefonía móvil de quinta generación (5G).
Dadas las infinitas aplicaciones y oportunidades de negocio que ofrece, la tecnología 5G se ha convertido en una cuestión estratégica a nivel global, y su seguridad y fiabilidad, en una de las máximas prioridades de los gobiernos.