EFE.- El papa Francisco envió este viernes al secretario de Estado, Paul Richard Gallagher, su “ministro de Exteriores”, a Bielorrusia, en un momento en el que las autoridades del país impiden regresar al arzobispo de Minsk, Tadeusz Kondrusiewicz.
El Vaticano informó que el papa envió a Gallagher pera manifestar su atención y cercanía a la Iglesia católica y al país entero. El programa de la visita incluye encuentros con las autoridades civiles y líderes de esta confesión.
Bielorrusia vive momentos tensos después de las protestas tras las últimas elecciones presidenciales en las que volvió a salir elegido Alexander Lukashenko.
En saludo a los fieles durante el rezo del ángelus del pasado 16 de agosto, Francisco hizo un llamamiento al diálogo, al rechazo de la violencia y al respeto de la justicia y la ley en Bielorrusia.
Las manifestaciones continúan y el domingo en Minsk, miles de personas volverán a tomar las calles. Esta marcha, dicen los líderes de la oposición, estará dedicada a Maria Kolesnikova, la líder de la protesta detenida en los últimos días.
Gallagher no podrá reunirse con el arzobispo de Minsk, que se encuentra en Polonia desde el 31 de agosto, donde había acudido para las celebraciones en honor de Nuestra Señora de Czestochowa, debido a la prohibición emitida por las autoridades bielorrusas contra el prelado para regresar a su país
