Argentina aprobó un nuevo impuesto a las grandes fortunas para pagar por suministros médicos y financiar la ayuda estatal en medio de la pandemia del coronavirus.
La iniciativa fue votada en el Senado este viernes en una sesión especial que duró más de seis horas y obtuvo 42 votos a favor y 26 en contra, publicó BBC Mundo.
La llamada Ley de Aporte Solidario y Extraordinario concierne a más de 12 mil personas que declararon un patrimonio superior a 200 millones de pesos (US$2,5 millones) en todo el país.
Argentina ha sido una de las naciones sudamericanas más afectadas por la pandemia de coronavirus. Al 4 de diciembre había registrado cerca de 1,5 millones de casos y casi 40.000 muertes.
En octubre, se convirtió en el quinto país en todo el mundo en superar el millón de casos, pasando a ser la nación más pequeña en llegar a esa cifra.
El senador oficialista y presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado, Carlos Caserio, aseguró que la medida se trataba de una ayuda «única»: «Es un aporte que solicitamos a los altos y grandes patrimonios del país.
«Según un informe de la oficina de presupuesto del Congreso, con este aporte el Estado va a recaudar $420.000 millones (US$5,14 millones)».
«No estamos persiguiendo a nadie»
«Pareciera que estamos persiguiendo a los ricos, que no tiene nada de malo ser rico, pero el 99,98% de los argentinos no tiene que hacer este aporte y no estamos persiguiendo a nadie».
Por su parte, la oposición teme que el impuesto desaliente a los inversores extranjeros. El senador opositor Martín Lousteau fue uno de los primeros en criticarlo.
«Tenemos un país con presión tributaria récord y a pesar de eso tenemos pobreza récord y dificultad para generar empleo», afirmó.
«Digámoslo de una vez, esto no es un aporte, es un impuesto extraordinario por única vez y no entiendo cómo vamos a seguir financiando esas cosas si el aporte es solo por un año. Y ya sabemos qué pasa con los impuestos extraordinarios en Argentina».
Según la agencia de noticias AFP, el 20% del dinero recaudado será destinado para garantizar el abastecimiento de suministros médicos, 20% para socorrer a pequeñas y medianas empresas, otro 20% para becas estudiantiles, 15% para desarrollos sociales y el 25% restante para proyectos de gas natural.