EFE, LA PAZ.- Un juez ordenó este jueves la detención preventiva de siete dirigentes universitarios por la muerte de un grupo de estudiantes que cayeron casi 17 metros tras el desplome de una baranda en una universidad de Bolivia.
La decisión judicial de la detención preventiva se aplica a los acusados Pablo A.C.P., Wilson Q.CH., Vladimir P.A., Rosa M.M.G., Fanny MV.C., Nayeli V.CH.T. y Juan C.Y.C.L., todos dirigentes de la Universidad Pública de El Alto (Upea), señala un comunicado de la Fiscalía.
El dictamen también menciona que los acusados deberán estar en reclusión “por cuatro meses” en cárceles de La Paz mientras se completan las investigaciones.
Durante la audiencia, que se instaló alrededor de las 14.00 hora local (18.00 GMT) y que duró más de ocho horas, se estableció que los acusados “son con probabilidad autores del delito de homicidio culposo y lesiones culposas” de los once estudiantes que cayeron de un cuarto piso de un pabellón de la facultad de Ciencias Económicas, Financieras y Administrativa de la universidad.
“La probabilidad de autoría de los imputados se centra en la convocatoria por parte de los dirigentes del Centro de Estudiantes de las diferentes carreras del Área de Economía, Financiera a una Asamblea extraordinaria estudiantil presencial”, señala la Fiscalía en relación a la tragedia que dejó siete fallecidos y cuatro heridos.
Además que durante la audiencia se establecieron riesgos como el “peligro de fuga y obstaculización” de las personas acusadas, según la Fiscalía.
La investigación señala de que los dirigentes estudiantiles no respetaron las normas que prohíben aglomeraciones por la pandemia de la covid-19 y que sabían sobre “pugnas” entre dos frentes y que aún así convocaron a la reunión en la que “pusieron en peligro la vida de los universitarios”.
La valoración judicial se basó en declaraciones de testigos, actas forenses y policiales además del informe que realizó la universidad, aseguraron los fiscales, citados en el comunicado.
La causa de la muerte de los siete estudiantes fue por “múltiples traumatismos” en distintas partes del cuerpo dada la altura de la caída, según la valoración forense al momento del levantamiento de los cuerpos.
El suceso causó conmoción nacional por la crudeza de las imágenes que registraron el momento en el que se produjo el colapso de la baranda y la caía de los once universitarios a casi diecisiete.
La tragedia provocó sendos comunicados de solidaridad de entidades educativas y autoridades nacionales junto a los pedidos de justicia y de intervención del centro de estudiantes y la Federación Universitaria Local (FUL) por considerarse que se utilizaron amenazas para convocar el pasado martes a más de 500 universitarios a aquella reunión.