EFE.- El canciller de Guatemala, Pedro Brolo, realizará una gira la próxima semana por la frontera sur de Estados Unidos para revisar albergues temporales de migrantes habilitados en el estado sureño de Texas, indicó este domingo el Ministerio de Relaciones Exteriores guatemalteco.
La oficina de comunicación de la Cancillería informó, sin precisar fechas, que el canciller Brolo visitará “los albergues temporales que se encuentran habilitados en las ciudades de Dallas y McAllen, en Texas”, con el objetivo de “verificar el estado de salud y anímico” de los menores allí resguardados.
El canciller sostendrá además reuniones con “autoridades estadounidenses en esta materia y con representantes de organizaciones, además de (realizar) un recorrido con la Patrulla Fronteriza a inmediaciones del Río Bravo, para abordar temas de atención y protección”, subrayó la cartera de Exteriores.
También, Brolo revisará los “procesos” de los albergados “ante el incremento de la llegada de niños y adolescentes no acompañados en los últimos meses”, agregó la Cancillería.
El ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala también viajará con el objetivo de verificar la atención a los menores migrantes no acompañados, así como los procedimientos de reunificación familiar, además de que en los albergues “se cumpla con el respeto a sus derechos”.
Casi tres millones de guatemaltecos viven en Estados Unidos, la mayoría de manera irregular según cálculos oficiales, y al menos 300.000 intentan cada año cruzar sus fronteras de manera ilegal en busca del sueño americano.
Las deportaciones de inmigrantes guatemaltecos desde Estados Unidos descendieron en un 62 por ciento durante 2020 debido a la pandemia de la covid-19 con relación a 2019.
Ese año, de acuerdo con el Instituto de Migración, fueron retornados un total de 21.057 guatemaltecos frente a los 54.599 deportados durante 2019.
Dentro de los 21.057 guatemaltecos en 2020 se incluyen 2.817 menores de edad, de los cuales 1.762 no iban acompañados por un adulto.
El norte de Centroamérica, compuesto por Guatemala, El Salvador y Honduras, es una de las regiones más pobres y violentas del planeta, según diversos estudios de organismos internacionales.
Cada año, más de 500.000 personas procedentes de estos tres países intentan emigrar de manera ilegal a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida, incluyendo miles de menores de edad.