Según el documento, las mismas ‘deben representar plenamente los intereses de las empresas matrices’ y servir de contraparte de la agencia reguladora rusa Roskomnadzor, a partir del 1 de enero de 2022.
La ley introduce un conjunto de medidas para obligar a las empresas TIC a cumplir con la legislación nacional, entre ellas informar a sus usuarios sobre las regulaciones para evitar las violaciones a través de internet, entre otras.
El nuevo código se extenderá a los proveedores de alojamiento web, las plataformas de publicidad, las redes sociales y otros sistemas de difusión de datos e información en internet, indicó el sitio oficial del parlamento. La lista preliminar de sitios de la red de redes, cuyos propietarios pueden verse obligados a abrir sucursales u oficinas de representación en Rusia, incluye 20 plataformas.
Las nuevas regulaciones afectarán principalmente a Facebook, Instagram, Twitter, TikTok, Google, YouTube, WhatsApp, Viber, Telegram, entre otras compañías, algunas acusadas de no borrar contenidos prohibidos por la ley rusa o de bloquear los de medios de comunicación del país. También proveedores de alojamiento (Amazon, Digital Ocean, Cloudflare, GoDaddy), tiendas en línea (Aliexpress.com, Ikea.com, Iherb.com) y Wikipedia.org.
Durante la discusión del proyecto de ley en la Duma Estatal (cámara baja), su presidente, Viacheslav Volodin, señaló que la regulación de los gigantes de la tecnología de la información es una práctica legal común en muchos países.
En su opinión, las empresas extranjeras tuvieron la oportunidad de seguir el camino de la autorregulación, pero no la utilizaron, por lo que es necesaria una regulación legislativa, incluida la introducción de medidas coercitivas.
La ley recibió el apoyo del gobierno ruso, el Banco de Rusia y el Servicio Federal Antimonopolio.