“Happy birthday to me! 50. Y así vivo mi vida ‘sin-cuenta’ de aquellas malas experiencias, sino aprendiendo de ellas. Sin-cuenta de las personas que me hirieron, sino atesorando a la que me aman. Sin-cuenta del valor social o económico de la gente, sino de la sensación de paz, alegría y cariño que siento al estar con ellos», escribió la artista.
Yo no cuento nada, ni siquiera el tiempo. Tampoco miro la báscula”, dijo la artista y empresaria a Efe en una entrevista realizada a finales de 2020, en la que explicó que ha sido la fórmula que le permite controlar su ansiedad crónica.
Eso y “vivir la vida en el momento”. Eso implica dedicarle tiempo a sus animales, perros y pajaritos, y a su esposo, Tommy Mottola, y Sabrina y Matthew, los hijos de ambos.
Claro, y a su carrera, que es el lado que la mantiene “cuerda”.
Nacida en la Ciudad de México, Thalía comenzó a trabajar en el mundo del espectáculo antes de cumplir los 9 años. Poco antes había muerto su padre, un episodio que la dejó sin habla por más de 12 meses.
“Yo recuerdo que fui al hospital a despedirme de él y murió minutos después”, contó la artista durante una entrevista. Por mucho tiempo pensó que era su culpa, lo que transformó su duelo en trauma. De hecho, además de terapia, fue el meterse en la música lo que la ayudó a superarlo.