Fue muy lamentable, muy triste, y se atiende a los familiares de las víctimas, y se sigue pendiente porque hay desborde de otros ríos y presas debido a que llovió muchísimo y siguen las aguas en muchos estados de México, dijo.
Agregó que ‘están atentos y planteando a la gente que busquen albergues y se trasladen a zonas altas. Las autoridades atienden a todos los damnificados, y el Gobierno federal y el estado de Hidalgo están ayudando en todo lo que corresponde’.
Al mismo tiempo, explicó, se produjo un sismo muy fuerte antes de las 9 de la noche de ayer y que se sintió muy fuerte en la Ciudad de México, con epicentro en Acapulco, estado de Guerrero, pero afortunadamente no hay daños mayores, y solo un muerto de un joven que iba en una motocicleta en Guerrero.
El gobernador de ese territorio, expresó López Obrador, informó que solo hubo derrumbes, no hay interrupción en las carreteras, se rehabilitó el tránsito, aunque se suspendió el tráfico aéreo en Acapulco, no hubo indicio de marea alta en la costa de Guerrero, tampoco daños graves.
Dijo que en Puebla, Oaxaca, otros estados y Ciudad de México tuvieron complicaciones y la jefe de Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum, informó ‘de manera muy rápida y eficiente que no hubo daños a pesar de su intensidad’.
Ayudó mucho, agregó, que en muchas zonas la alarma funcionó, y ahora hay que enfrentar esas adversidades y salir adelante como siempre ha hecho México y en esa voluntad está su fortaleza.
A veces se padecen momentos difíciles como los de ayer, señaló el mandatario, pero no siempre se estamos de mal, porque hay esperanzas y a los mexicanos nada nos quita el derecho a la esperanza.
El presidente destacó la gran y oportuna colaboración de todas las secretarías del estado, en particular las fuerzas armadas, la marina y la seguridad ciudadana que se unieron como uno solo para ayudar a la gente tanto por las inundaciones como por el terremoto.