Montados en enormes caballos, los arrogantes cowboys impedían a cientos de haitianos cruzar hacia territorio de Estado Unidos, agregó, refiriéndose a las imágenes en las cuales agentes de la Patrulla Fronteriza a caballo golpeaban a los inmigrantes con látigos.
Según el articulista, la mayoría de ciudadanos llegaron hasta allí tras recorrer miles de kilómetros, ‘pero a las puertas de la tierra prometida, el sueño americano los recibió a bofetadas, o mejor dicho, a latigazos. Y luego los apresaron, los montaron en un avión, y los mandaron de regreso hacia Haití’.
El drama de los haitianos y su huida desesperada y en masa del infierno en el que viven conmueve al mundo, expresó Acosta, lacera conciencias y provoca severas críticas al sistema migratorio estadounidense.
Asimismo, manifestó que el mundo solo mira de lejos el triste espectáculo, la miseria sin límites, el caos imperante en un país, en cual sus élites le han dado la espalda, de manera irresponsable y egoísta, a los sufrimientos de su pueblo.
‘A la hora de la verdad, la comunidad internacional hace muy poco por cambiar la triste suerte de nuestros vecinos, por tratar de enderezar su derrotero hacia el desastre total’, concluyó.