Santo Domingo. – La calificadora de riesgo Fitch Ratings dio a conocer hoy que mejoró de negativa a estable la perspectiva de República Dominicana y afirmó su calificación en BB- ante un crecimiento económico más rápido de lo esperado este año y la reducción del déficit fiscal.
“La economía dominicana se está recobrando robustamente, creciendo un estimado de 11 % en 2021 (sobrepasando nuestra proyección de 4.9 % en marzo), y esperamos que el aumento de la inversión impulse un crecimiento superior al potencial del 5.7 % en 2022 y del 5.3 % en 2023”, dijo la reputada firma calificadora internacional en una publicación que circuló este miércoles.
Fitch Ratings expresó que la recuperación económica y las iniciativas de política fiscal estimularon una disminución más rápida de lo estimado del déficit del gobierno general y del endeudamiento neto estimado, que para este año calcularon en 3.0 % del producto interno bruto (PIB) y del 2.4 % del PIB, respectivamente. Además, la agencia resaltó que la fuerte recuperación económica ha impulsado los ingresos fiscales, de modo que superaron las expectativas presupuestarias.
Estimó, además, que la razón deuda/PIB se reducirá a 51 % en 2021 y se estabilizará en 49 % durante los dos años siguientes, muy por debajo del pico de 58.2 % del PIB registrado durante la pandemia y del promedio de 57 % de los países pares de calificación “BB”.
La firma reseñó que una de las fortalezas crediticias con que cuenta República Dominicana es la uniformidad en el calendario de amortizaciones de la deuda externa, lo que está respaldado por “una gestión activa de la deuda y una base de inversionistas internacionales bien cultivada”.
Fitch Ratings señaló que la inversión privada está creciendo en el sector hotelero, en zonas francas manufactureras, infraestructura y viviendas, al tiempo que resaltó la fuerte recuperación en las actividades turísticas e industriales.
La agencia destacó también la tasa de vacunación contra el COVID-19, que alcanza a más de la mitad de la población, y el levantamiento de las restricciones sanitarias. Ante ese escenario, observó que el nivel de consumo se mantiene firme, “sostenido por las fuertes remesas desde Estados Unidos y la recuperación del mercado laboral”.
“República Dominicana tiene una clasificación media del Indicador de Gobernanza Mundial (WGI, por sus siglas en inglés) en el percentil 45.2, que refleja un historial reciente de transiciones políticas pacíficas, un nivel moderado de derechos de participación en el proceso político, una capacidad institucional moderada, un estado de derecho establecido y un nivel moderado de corrupción”, enfatizó el reporte.
Los analistas resaltaron la estabilidad política, continuidad de la política macroeconómica y respuesta puntual y oportuna ante la pandemia durante el 2020.
Destacaron también, la posibilidad de que el WGI se vea reforzado por los avances del gobierno de Luis Abinader en las promesas de reforma institucional, incluido el fortalecimiento de la independencia judicial, la independencia fiscal y la reducción de las pérdidas financieras de las empresas de servicios públicos de electricidad, prometida en virtud del Pacto Eléctrico.
El pasado 3 de diciembre la calificadora Standard & Poor’s también mejoró la perspectiva crediticia de negativa a estable y afirmó la calificación de República Dominicana en BB-/B, luego de estimar un crecimiento económico favorable para el país, así como la continuidad de las políticas públicas por los próximos 12 a 18 meses.