Santo Domingo, República Dominicana. -El Movimiento Cívico no partidista, Participación Ciudadana, realizó un llamado al Congreso Nacional para que no fragmente más el territorio nacional, que solo tiene 48,442 kilómetros, divididos en 31 Provincias y un Distrito Nacional, 158 Municipios y 238 Distritos Municipales.
Señalaron que esta división territorial, sólo agregaría más gasto al Estado y con ello, sangrarían los ingresos. Ya la nómina pública representa un 15%, de la fuerza laboral, incluyendo el sector formal y el informal. La densidad pública ocupacional en el país está entre las más altas en la región.
“Mas fragmentación del territorio, no implica mayor calidad de servicios, eficiencia y eficacia, pero sí, más empleos políticos”, puntualizó la institución.
Congresistas de todos los partidos, aprobaron de urgencia una nueva provincia, ignorando lo que establece el artículo 193 de la Constitución, que dice: “La organización territorial se hará conforme a los principios de unidad, identidad, racionalidad política, administrativa, social y económica”. Adicionalmente, los artículos 194 y 195 establecen la prioridad de un Plan de Ordenamiento Territorial y de una ley orgánica que regule el nombre y límites de las regiones, provincias y municipios.
Al realizar un análisis de la distribución geográfica de 12 países de la región, se ve claramente que la República Dominicana hace mucho que sobrepasó los límites razonables de fraccionamiento territorial.
El movimiento cívico realizó un llamado a los Congresistas a abandonar los intentos de mayor fraccionamiento territorial y concentrarse en los temas cruciales para la sociedad que están pendientes de legislación, en el marco de la institucionalidad, el desarrollo y la transparencia, como lo son: la Ley de Extinción de Dominio, el Código Penal, que tiene más de 20 años en esa institución y la de Ordenamiento territorial, que data desde que se promulgó la Constitución en el 2010.
“En estos momentos en que el país y el mundo atraviesan por una fuerte crisis económica, una terrible guerra que nos está afectando a todos, una lucha que aún no termina contra la pandemia y cientos de problemas sociales que afectan a nuestra población, no es justo que los legisladores se dediquen a discutir propuestas que no representan ningún beneficio para la población y que, por el contrario, desviarían recursos que ahora se necesitan más que nunca para afrontar las verdaderas necesidades del país”, concluyó la institución de la sociedad civil.