INFOBAE.-En mayo del año pasado, la Contraloría General de la República descubrió que la presidenta de la República, Dina Boluarte, quien por ese entonces lideraba el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), tenía un cargo en una asociación privada a pesar de que por ley está prohibida. Cuando se creía que lo había dejado, tal parece que se olvidó.
Según el diario Perú 21, Boluarte Zegarra se mantiene como presidenta del Club Departamental Apurímac. De acuerdo a la partida N° 03001776 inscrita en la Superintendencia de Registros Públicos (Sunarp), la mandataria seguirá en este puesto hasta el próximo 15 de febrero de 2024. Su mandato inició en 2019 y prolongó su gestión hasta el próximo año.
En esa línea, la jefa de Estado sigue infringiendo el artículo 126 de la Carta Magna que, a pesar de estar referido a sólo los ministros de Estado, también alcanza a un presidente de la República en el ejercicio de sus funciones constitucionales.
“Los ministros de Estado no pueden ejercer otra función pública, excepto la legislativa. No pueden ser gestores de intereses propios o de terceros ni ejercer actividad lucrativa, ni intervenir en la dirección o gestión de empresas ni asociaciones privadas”, se lee en el dispositivo legal.