Se espera que Microsoft Corp obtenga la aprobación antimonopolio de la UE para su adquisición de Activision por 69.000 millones de dólares con su oferta de acuerdos de licencia a sus competidores, según afirmaron tres fuentes familiarizadas con el asunto, lo que le ayudaría a superar un gran obstáculo.
Microsoft anunció la oferta de Activision en enero del año pasado, la mayor de su historia, para hacer frente a los líderes Tencent y Sony, en el floreciente mercado de los videojuegos y aventurarse en el metaverso, mundos virtuales en internet donde la gente puede trabajar, jugar y socializar.
Además de los acuerdos de licencia para los competidores, es posible que Microsoft también tenga que ofrecer otras soluciones de comportamiento para disipar las preocupaciones de otras partes además de Sony, dijo una de las fuentes. Estos remedios suelen referirse a la conducta futura de la empresa fusionada.
Las acciones de Activision, que subieron un 1,8% en las operaciones antes de la apertura del mercado tras la publicación del artículo de Reuters, subían un 2,6% en las últimas operaciones.
El presidente de Microsoft, Brad Smith, declaró el mes pasado que el grupo de software estadounidense estaba dispuesto a ofrecer a sus competidores acuerdos de licencia para abordar las preocupaciones de competencia, pero que no vendería la lucrativa franquicia «Call of Duty» de Activision.
Smith afirmó que no es factible ni realista pensar que un juego o una parte de Activision pueda separarse del resto.
El organismo de defensa de la competencia de la UE declinó hacer comentarios.
Microsoft dijo que estaba «comprometida a ofrecer soluciones efectivas y fácilmente ejecutables que aborden las preocupaciones de la Comisión Europea».
«Nuestro compromiso de conceder a largo plazo un acceso 100% igualitario a Call of Duty a Sony, Steam, NVIDIA y otros preserva los beneficios del acuerdo para jugadores y desarrolladores y aumenta la competencia en el mercado», dijo un portavoz de Microsoft.
(Reporte de Foo Yun Chee; Edición de Hugh Lawson, Elaine Hardcastle, Jane Merriman y Marguerita Choy, editado en español por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)