RT. El exitoso cantante y reguetonero puertorriqueño Bad Bunny protagoniza una portada catalogada de histórica de la revista Time que, por primera vez en cien años, tiene un título en español.
En la edición de abril de la publicación estadounidense está Benito Antonio Martínez Ocasio, sobre un fondo rojo, trajeado con un sobretodo negro y con una flor de tela en la solapa. En la leyenda aparece el nombre del artículo ‘El mundo de Bad Bunny’ y una frase dicha por el cantante: «No voy a hacer otra cosa para que a ti te guste».
El intérprete de 29 años es el músico más escuchado del mundo en la plataforma Spotify por tercer año consecutivo, tuvo el mayor récord de ganancias por sus giras en 2022, equivalente a unos 435 millones de dólares, y su álbum ‘Un verano sin ti’ tuvo el mayor rendimiento del año de Billboard, dejando atrás a Taylor Swift y Harry Styles.
Según Time, el reguetonero ha logrado «hacer lo que quiera» y esto «le ha traído un éxito sin precedentes«, porque ha interpretado sus temas en español, no ha negado sus posiciones políticas y las ha incluido en su atuendos en sus apariciones públicas.
El también compositor es el mayor de tres hermanos, creció en Almirante Sur, una zona rural del municipio Vega Baja, a 45 minutos de la capital puertorriqueña. «Sus padres, un camionero y una maestra, pasaron por momentos fáciles y ‘difíciles para traernos comida‘», recuerda la publicación.
«Un tipo nuevo de estrella pop»
«Bad Bunny es quizás el primer artista ‘crossover’ inverso del mundo, cuyo éxito proviene de la negativa a atender a la corriente principal. Su originalidad obstinada, su independencia y su lente ferozmente local lo han convertido en un tipo radicalmente nuevo de estrella del pop global», dice el artículo firmado por Andrew R. Chow y Mariah Espada.
Los autores del escrito lo catalogan como el «heredero legítimo» de Frank Sinatra, Michael Jackson o Beyoncé, con apenas siete años de trayectoria.
En el texto se afirma que el «ascenso de Benito ha sido paralelo a un período particularmente tumultuoso en la historia de Puerto Rico«.
En el recuento aparece el año 2016, cuando lanzó su primer sencillo, y el Congreso promulgó la Ley de Supervisión, Administración y Estabilidad Económica de Puerto Rico (PROMESA) para reestructurar la deuda estimada de 70.000 millones de dólares de la isla. Con este instrumento legal se impusieron medidas de austeridad «que redujeron los servicios públicos para la isla, que tiene una de las tasas de pobreza más altas de los EE.UU.».