(EFE).- El Ministro de Defensa chino, Li Shangfu, se reunió el domingo en Moscú con el presidente ruso, Vladímir Putin, a quien trasladó que Pekín está dispuesto a «reforzar la comunicación estratégica» entre los Ejércitos de ambos países.
«China está dispuesta a trabajar junto con Rusia para fortalecer la comunicación estratégica entre los dos Ejércitos y reforzar la coordinación y la cooperación multilateral con el fin de hacer nuevas contribuciones a la hora de salvaguardar la seguridad y la estabilidad global y regional», destacó Li, recoge la agencia estatal Xinhua.
Agregó que «la confianza militar mutua entre los dos países se ha consolidado cada vez más, lo que se traduce en un progreso sustancial en términos de cooperación».
Según Xinhua, Putin recordó «la reciente y fructífera visita del presidente chino, Xi Jinping, a Rusia», durante la cual se trazó «el curso para el desarrollo de las relaciones entre ambos países», acordando «fortalecer aún más la coordinación estratégica y profundizar la cooperación práctica en varios campos».
El mandatario ruso agregó que la cooperación militar juega «un papel importante en los lazos Rusia-China», y expresó su esperanza de que los dos Ejércitos «fortalezcan la cooperación en capacitación conjunta, intercambios profesionales y otras esferas».
Li se encuentra en Rusia entre el 16 y el 19 de abril invitado por su homólogo del país euroasiático, Sergei Shoigú.
Durante su estancia, se reunirá con líderes militares rusos y visitará academias militares, informó la semana pasada el portavoz castrense chino Tan Kefei.
Los ejércitos chino y ruso «han mantenido una interacción estrecha» que ha propiciado «nuevos desarrollos en comunicación estratégica, ejercicios militares conjuntos y cooperación pragmática», indicó Tan.
Dicha interacción «ha enriquecido la asociación estratégica integral» entre Moscú y Pekín, apuntó entonces el portavoz.
El Ejército chino declaró a finales de marzo estar «listo para aumentar la cooperación y la comunicación» con las fuerzas armadas rusas.
Li, sancionado en 2018 por Estados Unidos acusado de comprar armamento a la empresa estatal rusa Rosoboronexport, fue nombrado ministro de Defensa en marzo de este año.
El Gobierno chino, que ha mostrado su oposición a las sanciones contra Moscú, emitió en febrero una declaración sobre lo que denomina «conflicto» en Ucrania en la que defiende un alto el fuego y el abandono de la «mentalidad de guerra fría», propuesta criticada por Occidente por poner en el mismo plano «al agresor y al agredido».
En su documento, Pekín defiende el respeto a la integridad territorial de los países, incluido Ucrania, y a las «legítimas preocupaciones de seguridad de todas las partes», en referencia a Rusia.