(BBC Mundo).-Reza la sabiduría popular que el tiempo no pasa en vano para nadie y para el octogenario Joe Biden esto puede ser un problema. ¿Puede el presidente de Estados Unidos convencer a los votantes de que su edad no es un asunto del que preocuparse?
Biden anunció este martes que quiere cumplir otros 4 años más de servicio en la Casa Blanca. Los estadounidenses, según una última encuesta de NBC News, no lo tienen tan claro.
La encuesta muestra que el 70 % de los estadounidenses y el 51 % de quienes votan al Partido Demócrata piensan que no debería buscar la reelección. E identifica una de las principales preocupaciones que tiene aproximadamente la mitad de la gente que quiere que se haga a un lado en 2024: su edad.
Biden ya es el presidente de mayor edad de la historia del país. Si ganara la reelección, asumiría el cargo a los 82 años y terminaría su segundo mandato a los 86.
Según las estadísticas del Gobierno de EE.UU., la esperanza de vida promedio para un hombre de 82 años es de 6.77 años, con un 8 % de probabilidad de muerte en los próximos 6 meses.
En el video que el equipo de Biden lanzó para anunciar que se presentará a la reelección, describe ampliamente su plan para proteger las «libertades personales» y advierte contra las amenazas planteadas por sus oponentes republicanos, pero no aborda el tema de la edad de frente.
En lugar de eso, intercala cortes donde se ve a un Biden animado, trotando, luciendo comprometido… al son de una música instrumental in crescendo.En el vídeo también sale muchas veces la vicepresidenta Kamala Harris, quien asumiría la presidencia en caso de que Biden quedara incapacitado. Con sus 58 años, se espera que su presencia inyecte un poco de vida y energía a la campaña. Como dato a destacar, el entonces vicepresidente Biden no aparecía en el video de la reelección de Barack Obama en 2012.
El video no va a ser suficiente, según el veterano consultor político Bob Shrum, director del Centro para el Futuro Político y ex asesor principal de las campañas presidenciales de los demócratas Al Gore y John Kerry.
«Las preguntas sobre la edad se responden con una campaña vigorosa. No se responde hablando de ello», dice Shrum.
Añade que el tema de la edad solo se convertirá en un problema si Biden comete un error «grave» o tropieza en la campaña electoral. Y si ese es el caso, los republicanos, que ya están tratando de amplificar todos los errores de Biden, estarán listos para argumentar que Biden ya no es apto para la presidencia.
El año pasado, 54 republicanos en la Cámara de Representantes firmaron una carta a la Casa Blanca donde expresaban su «preocupación» por el estado cognitivo de Biden y exigían que se sometiera a una prueba de demencia.
La carta enumeraba una serie de traspiés y declaraciones erróneas de Biden durante su presidencia.
«Estos errores recientes no son incidentes aislados, son parte de una historia más amplia de sus acciones que ejemplifican su deterioro cognitivo», decía la carta.
Donald Trump, quien hoy día es el principal contendiente para la nominación presidencial republicana de 2024, se ha hecho eco de este tipo de «preocupaciones» agudas.
En los mítines políticos previos a las elecciones legislativas de mitad de período del año pasado, Trump frecuentemente mostraba un video con diversos errores y tropiezos de Biden.»Joe Biden no puede hablar con claridad. No puede pensar con claridad», dijo Trump al mostrar el video en un mitin en octubre en Arizona.
Según Jim Messina, quien dirigió la campaña de reelección de Barack Obama en 2012, los demócratas pueden contar con Trump, solo cuatro años menor que Biden, para ayudar a resolver el problema de la edad.
«Los votantes dicen ‘mira, ambos son viejos. Dime quién de los dos va a mejorar mi vida'», contó Messina al podcast de BBC Americast.
«Los demócratas hacemos una cosa todas las noches: nos sentamos, nos arrodillamos y rezamos a Dios para que Donald Trump sea el candidato republicano a la presidencia», bromeó Messina.
Biden también enfrentó preguntas sobre su edad hace cuatro años, aunque la distinta naturaleza de la carrera presidencial de entonces, en medio de la pandemia de covid-19, ayudó a aislar al candidato de parte de la exposición que conlleva una campaña electoral primaria y general nacional. Y al final el tema de la edad no fue un factor en la victoria de Biden sobre Trump.
Esta vez, Biden disfrutará de los beneficios de hacer campaña como presidente en funciones. Eso incluye viajar en el Air Force One y asistir a eventos políticos meticulosamente planificados no solo por el personal profesional de la campaña, sino también por el equipo de seguridad del presidente.
Es un tipo de experiencia muy diferente a la que deben afrontar los candidatos no titulares. Sus rivales tendrán que luchar durante las primarias en las nieves de New Hampshire e Iowa, a menudo con presupuestos reducidos y compitiendo en un terreno lleno de oponentes donde se puede tardar más de un año en vencer.
Eso le dará a Biden el lujo de tener una buena ventaja frente a su oponente republicano. El período de campaña activa y frenética que tendrá que soportar se puede medir en semanas y meses en la segunda mitad de 2024.
Y si hubiera un lado positivo en la mencionada encuesta de NBC es que si Biden se postula nuevamente, el 88 % de los demócratas dijo que definitivamente o probablemente apoyaría al candidato.
«Biden siempre es subestimado», apuntó Shrum. «Biden fue subestimado en 2020. La gente lo descartó después de las primeras dos primarias. Y luego ganó las primarias por goleada».