Se reportó el secuestro de al menos 50 migrantes y dos conductores de autobús en el estado mexicano de San Luis Potosí. Las autoridades del vecino Nuevo León confirmaron que varias personas fueron localizadas a cielo abierto y auxiliadas por la policía estatal Fuerza Civil.
De acuerdo con Gerardo Palacio, secretario de Seguridad de Nuevo León, algunas de las personas secuestradas escaparon de sus captores, salieron de San Luis Potosí y se internaron en territorio neoleonés.
La retención ilegal de los migrantes se atribuye al Cártel del Golfo, después de que alguien en su nombre realizara una llamada a la empresa operadora del autobús exigiendo un rescate de 1.500 dólares por cada una de las personas privadas de libertad.
Tras el secuestro, el vehículo fue encontrado vacío y abandonado en Nuevo León, según confirmó la Fiscalía de San Luis Potosí en un comunicado, en el que afirma que se encuentra colaborando con autoridades en una estrecha cooperación entre corporaciones municipales, estatales y federales, «a fin de esclarecer los hechos».
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este miércoles que «se está atendiendo» el secuestro. «Ya se encontraron algunos (migrantes), ya se tiene identificado el sitio. Se está trabajando en eso, hay un despliegue de la Guardia Nacional, y esperemos rescatarlos», aseveró.