RT. La Guardia Civil de España ha realizado una macrooperación contra el tráfico ilegal internacional de armas de fuego en colaboración con la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) del Reino Unido, la Europol y entidades policiales de otros ocho países, según un comunicado del organismo publicado este domingo.
El texto indica que la operación Diana-Vizardlike, que se enmarca en la lucha contra las redes de tráfico de armas que nutren las organizaciones criminales o terroristas, comenzó en 2019 cuando agentes de la institución española y de la NCA detectaron numerosos delincuentes que se surtían de armas ilegales en el mercado negro europeo.
Los investigadores se percataron de que personas de diferentes países de la Unión Europea utilizaban identidades falsas, direcciones ficticias o medios virtuales de pago clonados para conseguir armas de alarma o señales —conocidas como detonadoras o de fogueo— en establecimientos y plataformas en línea autorizadas para luego transformarlas en letales con capacidad de efectuar fuego real y disparar munición con proyectil.
Se destaca que este tipo de arma es especialmente preocupante en países como el Reino Unido, donde más del 40 % de armas de fuego utilizadas en hechos delictivos son armas que originalmente no eran letales.
La Guardia Civil española hizo el seguimiento y análisis de casi 2.000 ventas de armas a ciudadanos extranjeros y, cuando sospechaba de algo, lo comunicaba a la Europol y a la policía de los países donde residían los compradores ilegales.
Fue así como se ejecutaron más de 20 órdenes europeas de investigación y comisiones rogatorias internacionales (solicitudes de auxilio judicial extranjero), así como 150 entregas y registros en el Reino Unido, Países Bajos, Portugal, Suecia, Italia, Suiza, Grecia, Bélgica o Rumanía, que han permitido detener a 80 personas e incautar más de 760 armas de fuego.