AP. La corredora campeona Caster Semenya obtuvo una victoria legal potencialmente histórica el martes cuando el Tribunal Europeo de Derechos Humanos decidió que fue discriminada por las reglas deportivas que la obligan a reducir médicamente sus niveles de hormonas naturales para competir en competencias importantes.
El fallo del tribunal con sede en Estrasburgo, Francia, cuestionó la “validez” de las polémicas normas internacionales de atletismo en cuanto violaron los derechos humanos de Semenya.
Pero el primer éxito legal de la dos veces campeona olímpica después de dos apelaciones fallidas en el máximo tribunal deportivo y la corte suprema suiza vino con una advertencia importante. En medio de su intento de que se le permitiera volver a correr sin restricciones e ir por otro oro en los Juegos Olímpicos del próximo año en París, el juicio del martes, aunque importante, no resultó inmediatamente en la eliminación de las reglas.