Madrid, 17 Ago. (EUROPA PRESS) – Físicos del City College de Nueva York han demostrado que confinar la luz en el interior de materiales magnéticos puede mejorar drásticamente sus propiedades intrínsecas.
Físicos del City College de Nueva York han demostrado que confinar la luz en el interior de materiales magnéticos puede mejorar drásticamente sus propiedades intrínsecas.
La fuerte respuesta óptica de los imanes es importante para el desarrollo de láseres magnéticos y dispositivos de memoria magneto-óptica, así como para nuevas aplicaciones de conducción cuántica.
En un nuevo artículo publicado en Nature, el equipo de Menon describe las propiedades de imanes en capas con excitones fuertemente ligados, cuasipartículas con interacciones ópticas especialmente intensas. Como resultado, el material puede confinar la luz por sí mismo.
Como demuestran sus experimentos, la respuesta óptica de este material a los fenómenos magnéticos es varios órdenes de magnitud superior a la de los imanes comunes. La luz viaja de un lado a otro dentro del imán, por lo que la interacción es mayor», explica en un comunicado el Dr. Florian Dirnberger, autor principal del estudio.
Por ejemplo, cuando se aplica un campo magnético externo, la reflexión de la luz en el infrarrojo cercano se ve alterada de forma significativa, lo que básicamente cambia el color del material». Se trata de una reacción magneto-óptica bastante fuerte».
«En general, la luz no reacciona muy fuertemente al magnetismo. Por eso las aplicaciones tecnológicas basadas en el efecto magneto-óptico suelen requerir la implementación de esquemas de detección óptica muy sensibles».
Jiamin Quan, coautor del estudio, describe cómo este avance podría beneficiar al público en general. Dada la fortísima interacción entre el magnetismo y la luz, podrían crearse láseres magnéticos que replantearían el viejo concepto de memoria magnética controlada ópticamente».
