Valencia, 27 Sep (EUROPA PRESS) -.
El Centro Tecnológico Ainia ha desarrollado dos prototipos para el control microbiológico de productos frescos. Uno de ellos está dirigido al control de la calidad microbiológica de productos cárnicos y el otro se centra en la detección rápida de Listeria monocytogenes en productos vegetales.
Estos estudios, incorporados al proyecto Safefood II que cuenta con el apoyo del Ivace, son una continuación de Safefood, cuyo objetivo es desarrollar nuevas herramientas tecnológicas que ayuden a la industria alimentaria a reforzar la gestión de la seguridad alimentaria y proteger la salud de los consumidores.
El prototipo es capaz de clasificar productos cárnicos en tiempo real en función de su calidad microbiológica. Para ello se utiliza la visión hiperespectral. La visión hiperespectral es una tecnología fotónica que permite obtener mediciones de propiedades fisicoquímicas específicas de los productos alimentarios en distintas bandas del espectro electromagnético.
Para desarrollar los prototipos de detección se utilizaron muestras de jamón de laboratorio no contaminadas y contaminadas artificialmente. Ambos tipos de muestras se midieron dos veces, una con el prototipo y otra con técnicas convencionales de análisis microbiológico.
A continuación, los datos de ambos se analizaron mediante técnicas de aprendizaje automático para clasificar las muestras según los niveles de contaminación.
José Berenguer, miembro de la Unidad de Tecnología de Automatización de Procesos y Sensores Espectrales del Inia, señaló que la visión hiperespectral es «una tecnología con un gran potencial para la industria agroalimentaria y ha sido la base para el desarrollo de un sistema de medición de la composición de los alimentos y de detección de sustancias extrañas». Explicó que.
Con el proyecto Safefood queríamos investigar aplicaciones nuevas y complejas, como el control de calidad microbiológico en tiempo real».
Por su parte, el prototipo realizado para la detección rápida de Listeria monocytogenes en productos vegetales utiliza biosensores acústicos.
Con este fin, se evaluaron varios anticuerpos contra L. monocytogenes disponibles en el mercado para determinar su sensibilidad y especificidad frente a diversas especies bacterianas patógenas y no patógenas. A continuación se definieron protocolos para la preparación de las muestras reales.
Estos protocolos constituyeron la base para el análisis de extractos de muestras de verduras fermentadas y ensaladas recién cortadas, así como de muestras de ambos productos contaminadas artificialmente con diversas concentraciones de microorganismos. Por último, el tratamiento conjunto de los datos permitió establecer una correlación entre los resultados obtenidos con el biosensor y los recuentos en placa.
Aynia colaboró con varias empresas. Por un lado, Awsensors desarrolló el sistema de medición y diseñó la estrategia de preparación y limpieza del sensor. Por otro, Distribuciones Juan Luna, Monvital y Verdifresh colaboraron aportando muestras de jamón cocido, verduras fermentadas y ensalada fresca cortada.
