Madrid, 18 sep (EFE) – La Vuelta a España 2023, que ha finalizado este domingo en Madrid, se ha caracterizado especialmente por el nombre de su ganador, Sepp Kuss.
Sus compañeros de equipo Jonas Vingegaard y Primoz Roglic, y Rui Costa, que dio el visto bueno en Recumbelli a la salida en Lisboa en 2024.
También, el trío español de Juan Ayuso, Mikel Landa y Enric Mas, que intentó el podio pero se quedó corto de tiempo, Kayden Groves, que dominó la llegada masiva, y la belga Sian Uitdebroeks, que allanó el futuro de la carrera.
Kuss, el ganador sorpresa
Sepp Kuss comenzó su tercera Gran Vuelta de la temporada con la intención de repetir la victoria en la Gran Vuelta que ya habían logrado Vingegaard o Roglic esta temporada. El esloveno ganó el Giro y el danés el Tour. Pero hizo la escapada en Javalambre y aguantó en los Pirineos, donde Evenpoel se vino abajo.
Cuando Roglic aceleró en Angliru, estuvo a punto de abandonar. Pero allí encontró la rueda salvadora de Landa y el valor para luchar durante unos segundos. En el momento en que Vingegaard dijo que quería que ganara Cus, todo quedó claro para este corredor americano casi español. Un campeón amistoso.
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Vingegaard y Roglic, de líder a feliz corredor social
Roglic, que llegaba a la Vuelta como líder del Jumbo Visma, buscaba inicialmente cerrar un impresionante 2023 con su tercera victoria de la temporada en una Gran Vuelta y la cuarta en una carrera que ha llegado a dominar con puño de hierro. Vingegaard se escapó en el último momento y parecía que Logric-Lemko se convertiría en Jumbo-Lemko.
Sin embargo, el belga se vino abajo en los Pirineos y Cous mantuvo la ventaja que había conseguido en Jabalambre, por lo que al final fue su mejor apoyo en su habitual estilo de lujo.
Ayuso, Landa y Mas, podios cerca y lejos.
Los puestos cuarto, quinto y sexto no estaban mal ni mucho menos, pero no estaban cerca del podio. Mas y Ayuso querían llegar más alto, mientras que Landa empezó la carrera sin muchas ganas y se conformó con el quinto puesto. El cuarto puesto de Ayuso no estaba tan mal, pero Mas estaba muy decepcionado con su sexto puesto.
El mejor resultado del ciclismo español más allá de la general fue la victoria de etapa en Laguna Negra de Vinuesa de Jesús Herrada.
Lemco, el orgullo de los campeones.
Hundido en Aubisque, tuvo que salvar la carrera. Desde el momento en que quedó destrozado y llegó al Tourmalet a 30 minutos de los líderes, no dejó de atacar, día tras día. En Madrid, soñó con la victoria hasta que se quedó a pocos metros de la línea de meta. Lemko se lo dejó todo al imbatible Jumbo, que deleitó a la Vuelta con su lucha sin cuartel y tres victorias de etapa que habrían mandado a casa a cualquier otro corredor.
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Groves, el mejor velocista
El velocista del Alpecin Groves, que se dio a conocer en Cabo de Gata el año pasado, también ganó tres etapas. Empezó a dominar los sprints en la Vuelta y logró recuperarse de varias situaciones en Madrid, donde sufrió a rueda del Evenpoel y no pudo mantener su dominio.
Uitdebroeks, el futuro que viene
El nombre de Uit de Broeks no es fácil de recordar, pero todos los aficionados saben que es el futuro del motociclismo. Perdió un puesto frente a su compañero de equipo y líder Alexandre Vlasov en la última jornada, terminando octavo, pero siempre estuvo en el mejor grupo o cerca de él en los momentos decisivos. Él y Lenny Martínez, de 20 años, que llegó a ser líder con él, fueron las luces más brillantes de la Vuelta 2023.
Rui Costa, guiño a Lisboa 2024.
No se puede decir que la Vuelta de Rui Costa haya sido memorable, pero sí muy buena, ganada a su estilo, el más rápido y hábil en un grupo de escapados de gran nivel, y pendiente de otras posibles oportunidades. Fue una victoria que satisfizo a Intermarque y también mostró su entusiasmo por la Vuelta de 2024, que comenzará en Lisboa.
Ramón Orosa.
Por: efe’.
