Santo Domingo-La construcción de un canal en el río Masacre podría generar crecidas que inunden terrenos, afectando a zonas de regadío de parcelas de Haití y República Dominicana en meses de bajo caudal, reduciendo el caudal de este afluente en la bahía de Manzanillo o impacto en la remoción.
Así lo describe un informe elaborado por el Ministerio de Medio Ambiente y Agricultura, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI) y el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA) en mayo de 2021.
El mismo, señala que se puede llegar a un acuerdo entre ambos países para establecer un mecanismo de revisión conjunta de dichas obras que garantice la sostenibilidad de los ríos y advierte que de continuar la situación actual sin esto, se producirá la situación anterior.
El estudio advierte que los impactos causados por la reducción de caudales o la eliminación de los mismos pueden reflejar no sólo cambios físicos, como cambios en la temperatura del agua y arrastre de sedimentos, sino también efectos biológicos integrados, impactos sobre especies y ecosistemas marinos costeros.
En este sentido, la Comisión recomendó una paralización de los trabajos, ya que esta situación es una oportunidad para construir una plataforma que permita desarrollar una relación de equidad y racionalidad en la planificación del aprovechamiento y uso de los recursos hídricos compartidos por los dos países.
También es una oportunidad para entablar un diálogo bilateral sobre el agua entre representantes técnicos de los dos países, que más adelante podría convertirse en un comité.
