– Madrid, 6 Septiembre (EUROPA PRESS)
Un grupo de investigadores de la Universidad de Michigan (EE.UU.) y otras instituciones han descubierto que la diabetes, las condiciones de salud relacionadas con la edad y otras anomalías metabólicas pueden conducir a la acumulación de colesterol en la retina, que puede cristalizar fácilmente y conducir al desarrollo de retinopatía diabética.
Los hallazgos, publicados en Diabetologia, podrían conducir a un diagnóstico y tratamiento más precoces de la retinopatía diabética, una complicación frecuente que afecta al ojo.
Los depósitos cristalizados son muy reflectantes y pueden verse en las imágenes de la retina. Esto es importante porque permite a la mayoría de los optometristas realizar evaluaciones no invasivas de la retina, dando a más personas la oportunidad de un diagnóstico precoz.
La retinopatía es la principal causa de ceguera evitable y una de las complicaciones más temidas de la diabetes de tipo 1 y 2″. A los 20 años de padecer diabetes, todas las personas con diabetes de tipo 1 o 2 tendrán algún grado de retinopatía. Los tratamientos actuales son muy invasivos y sólo atacan las fases más avanzadas de la retinopatía», añadió.
Tim Dorweiler, autor principal del artículo y doctorando del programa de Fisiología Molecular, Celular e Integrativa de la MSU, explica que está investigando «qué se puede hacer para reducir el colesterol en la retina».
La retina es un órgano muy aislado, al igual que el cerebro, y ambos están separados del resto del cuerpo por una barrera sanguínea. Esto hace que el estudio de la retina sea difícil y muy complejo», explica.
Según George Abella, jefe del departamento de cardiología de la MSU, estos cristales de colesterol son como los que se encuentran en las placas ateroscleróticas, que se forman en las arterias y provocan infartos, y fueron descubiertos en los laboratorios de la MSU.
George Abella ayudó al equipo de investigación a identificar un método para escanear la retina utilizando una muestra de tejido modificada para microscopía electrónica de barrido. Este método también ayuda a analizar la composición de los cristales, que suele producirse cuando hay demasiado colesterol en un lugar.
También existe la esperanza de que los nuevos tratamientos para atajar los cristales formadores de colesterol puedan ser menos invasivos que las opciones actuales para la retinopatía diabética. Y cabe preguntarse por otras partes del cuerpo donde podrían tratarse estos cristales para prevenir otras enfermedades.