Roma – La Juventus se recuperó de su derrota del martes en Sassuolo con una trabajada victoria por 1-0 ante el Lecce, que estaba invicto hasta este partido.
La Juve rompió el empate con un gol de Arkadiusz Milik en la segunda parte, y habría sumado un punto y seguido invicta en Turín de no haber sido por este único tanto, ya que tomó el control y jugó segura durante la mayor parte del encuentro ante un Lecce que supo meterse en el partido en el Juventus Stadium.
Al igual que la temporada pasada, la Juve no se caracteriza por desplegar un fútbol atractivo y entretenido. De hecho, la derrota contra el Sassuolo se debió no sólo a algunos errores individuales, sino también a un ritmo lento, a pases previsibles y a una presencia ofensiva poco organizada.
El martes, la única forma de ganar era hacerlo en casa, ante nuestra afición. Los hombres de Massimiliano Allegri, suspendidos de las competiciones europeas, no tenían otra opción que terminar entre los cuatro primeros.
Los blanquinegros se enfrentaron a uno de los equipos más fuertes de la temporada, pero supieron sacar provecho de las jugadas a balón parado.
En la primera parte hubo poco movimiento por ambas partes. Sin embargo, sólo cuando el italiano Federico Chiesa hizo saltar la chispa intentaron siempre decantar el partido a favor de la ‘Vecchia Signora’, y los jugadores llenaron de energía el Juventus Stadium cuando se dirigieron al túnel de vestuarios con una pitada que también sirvió de advertencia.
No afectó al juego de los de Allegri, pero sí al marcador. Nada más empezar, en el minuto 57, Milik remató de cabeza un centro de Adrien Rabiot desde dentro del área.
El delantero, siempre atento, recogió el balón suelto en el segundo palo.
El polaco aprovechó al máximo su primera titularidad de la temporada y volvió a demostrar a su entrenador que puede competir con Kiesa y Vlahovic por la titularidad.
Vlahovic entró en juego para ayudar al goleador Milik a cerrar el partido a la contra en los últimos compases.
El francés Mohamed Kabba vio dos tarjetas amarillas, una de ellas por tirarse al suelo tras una carrera en el área de la Juve, sobre todo después de entrar en el minuto 70.