Gotemburgo, Suecia (AFP) – En su primer partido desde el incidente de Rubiales, y con la estrella de campeona del mundo en sus camisetas, la selección española femenina de fútbol victoria por 3-2 en un partido de la UEFA Nations League, junto con un mensaje contra los ataques sexistas.
Mariona Cardentey, de penalti (90+6), dio los tres puntos a España. Antes, Magdalena Eriksson había adelantado a las nórdicas en el minuto 23 y La Roja recortó distancias por medio de Atenea del Castillo (minuto 37) y Eva Navarro (minuto 77).
La atacante Atenea del Castillo declaró a TVE: «Ha sido un día difícil para todos, pero hemos demostrado que somos un equipo de verdad, que queremos representar a nuestro país y de eso se trata, de luchar hasta el final.»
La selección española femenina regresó a la competición tras proclamarse campeona del mundo en Sydney el pasado 20 de agosto.
Antes del choque del viernes, las jugadoras españolas y suecas se unieron para enviar un mensaje: las 22 titulares posaron detrás de una pancarta con el lema ‘Se acabó’, popularizado por el asunto Rubiales.
La pancarta, en la que también se podía leer «Nuestra lucha es una lucha global», es un gesto común a favor de la igualdad de género en el deporte y en la sociedad.
Justo antes de esta acción simbólica, las jugadoras españolas levantaron el puño en una fotografía oficial, mostrando unas vendas en forma de muñequera con los mensajes «Se acabó», «Jenni» y «10» (el número de Jenni Hermoso, que no fue convocada para el partido).
El beso no consentido provocó indignación en todo el mundo desde el primer día, lo que llevó primero a la suspensión de Rubiales y después a su dimisión.
El seleccionador Jorge Vilda también fue destituido y sustituido por el debutante sueco Monse Tome.
Los campeones del mundo se habían declarado inelegibles tras el «asunto Rubiales».
A pesar de la marcha de Rubiales y Vilda, seguían considerando que eran necesarios más cambios y continuaron inelegibles. A pesar de ello, fueron convocados.
Temiendo sanciones y suspensiones, los jugadores españoles agacharon la cabeza y se tomaron en serio la concentración en Oliva (Valencia) previa a la gira sueca.
Allí, la Federación Española de Fútbol acordó hacer algunos cambios de inmediato, entre ellos la dimisión el miércoles del secretario general, Androu Camps.
Las convocadas a la fuerza Mapi León y Patri Guijarro también decidieron marcharse. El acuerdo fue que no se impondrían sanciones a las jugadoras que decidieran no acudir a Suecia.
Nueve de las titulares de España en el partido contra Suecia eran jugadoras que habían ganado en Sydney apenas un mes antes.
Hubo cuatro cambios con respecto a la final contra Inglaterra, entre ellos el de Alexia Puteras en sustitución de Jenni Hermoso, dos veces ganadora del Balón de Oro.
Suecia empezó mejor el partido y Eriksson remató de cabeza un centro de CK en el minuto 23.
Empató en el minuto 38 con un disparo lejano de Atenea del Castillo. España siguió dominando el juego, pero no logró marcar un segundo gol cuando la atacante Eva Navarro anotó con un zurdazo enroscado (minuto 78).
Sin embargo, un penal transformado por Cardentey en el minuto 90 más cinco dio la victoria a España tras una semana difícil. El seleccionador, Monte Tomé, declaró a TVE que el triunfo fue «una victoria muy positiva y que despeja algunos de los días que hemos tenido», subrayando que la victoria fue «significativa».
El martes, en su segundo partido de la Nations League contra Suiza, pueden dar un paso más para poner fin a su crisis interna.