– Madrid, 27 Sep (EUROPA PRESS)
El Telescopio Gigante de Magallanes, un gran proyecto de telescopio terrestre cuya finalización está prevista para finales de esta década, está a punto de completar sus elementos ópticos gigantes.
El Laboratorio de Espejos Richard F. Callis de la Universidad de Arizona ha iniciado el proceso de cuatro años de fabricación y pulido del séptimo y último espejo primario, el último necesario para completar la superficie colectora de 368 metros cuadrados del telescopio.
Juntos, los espejos recogerán más luz que ningún otro telescopio existente y proporcionarán un análisis químico detallado de los cuerpos celestes y sus orígenes, lo que permitirá a la humanidad desvelar los secretos del universo.
La semana pasada, casi 20 toneladas de vidrio óptico de la máxima pureza se introdujeron en un horno único instalado bajo las gradas del estadio de fútbol americano de los Arizona Wildcats. El horno giratorio calienta el vidrio a 1.165°C y extruye el vidrio fundido para formar la superficie paraboloide curvada del espejo. El espejo, de 8,4 metros de diámetro (aproximadamente dos pisos de altura cuando está de pie), se enfría durante tres meses antes de pasar a la fase de pulido.
Una vez ensamblados, los siete espejos funcionarán como un espejo monolítico de 25,4 metros (con un diámetro igual a la longitud de una ballena azul adulta), proporcionando hasta 200 veces la sensibilidad y cuatro veces la resolución de imagen de los espejos modernos de los telescopios espaciales actuales.
El Telescopio Gigante Magallanes será el primer gran telescopio con un conjunto completo de espejos primarios. Se ha completado una sólida infraestructura operativa en el emplazamiento de construcción del telescopio en Chile, y se están fabricando intensivamente los subsistemas críticos del telescopio.
Robert Shelton, Presidente de Giant Magellan Telescope, explicó en un comunicado que «nos encontramos en la fase principal de fabricación y la mayor parte de los trabajos se están llevando a cabo en Estados Unidos». La estructura del telescopio, de 39 metros de altura, se está fabricando en Rockford (Illinois) con 2.100 toneladas de acero y el primero de los siete espejos secundarios adaptables del telescopio.
Rebecca Bernstein, Científica Jefe del Telescopio Gigante Magallanes, declaró: «Dispondremos de una combinación única de capacidades para estudiar los planetas con alta resolución espacial y espectral. Esta capacidad es clave para determinar si un planeta tiene una composición rocosa similar a la de la Tierra, si contiene agua líquida y si su atmósfera contiene la combinación adecuada de moléculas para indicar la presencia de vida».