KIEV, Ucrania (AP) – Ucrania lanzó el sábado por la mañana un nuevo ataque con misiles contra Sebastopol, en la Crimea ocupada. Funcionarios regionales designados por Moscú dijeron que el ataque se produjo un día después de que el centro de mando de la Flota del Mar Negro de Rusia fuera atacado, un militar desapareciera y se produjera un incendio en el edificio principal del complejo.
Sebastopol estuvo en alerta de ataque aéreo durante casi una hora después de que los restos de un misil interceptado cayeran cerca del muelle, dijo el gobernador Mikhail Razvodjaev en un mensaje de la aplicación Telegram. Los servicios de ferry se suspendieron temporalmente, pero se reanudaron más tarde.
También se escucharon potentes explosiones cerca de Vilne, en el norte de la península, anexionada ilegalmente por Rusia en 2014, y más tarde se detectó humo, según informaron los canales de noticias proucranianos sobre lo ocurrido en el territorio a través de Telegram.
Crimea ha sido un objetivo frecuente de las agresiones ucranianas desde que el presidente ruso, Vladímir Putin, ordenara una invasión a gran escala del país vecino hace unos 19 meses.
El jefe de los servicios de inteligencia ucranianos, Kirillo Budanov, declaró el sábado a Voice of America que al menos nueve personas murieron y 16 resultaron heridas como consecuencia del ataque de Kiev a la Flota rusa del Mar Negro el viernes.
Añadió que el general Aleksandr Romanchuk, al mando de un frente clave del sureste, se encontraba en «estado muy grave» tras el ataque.
Las afirmaciones de Budanov no pudieron ser verificadas de forma independiente y no aclaró si se utilizaron misiles occidentales en la operación.
El Ministerio de Defensa ruso anunció inicialmente que uno de sus marineros en el centro de mando había muerto en el ataque del viernes 22 de marzo, pero más tarde dijo en un comunicado que el oficial estaba desaparecido.
El día anterior, las Fuerzas Armadas ucranianas dieron a conocer detalles sobre el ataque en Sebastopol. Según el informe, las fuerzas aéreas llevaron a cabo 12 ataques contra cuarteles militares en zonas donde se concentraban personal, equipos y armas. Añadió que fueron atacados dos sistemas de misiles antiaéreos y cuatro unidades de artillería rusas.
Crimea es un importante bastión de apoyo a las operaciones rusas en Ucrania. Sebastopol alberga la principal Flota rusa del Mar Negro desde el siglo XIX y ha tenido especial relevancia en las operaciones navales desde el inicio de la invasión el pasado febrero.
Según el Instituto para el Estudio de la Guerra, un think tank con sede en Washington, en las últimas semanas Ucrania ha intensificado su ofensiva contra las instalaciones navales de la península de Crimea, mientras que el grueso de la contraofensiva de verano avanza lentamente en el este y el sur del país.
Según los expertos militares, es esencial que Kiev siga atacando objetivos en la península para desmoralizar a Rusia y debilitar sus fuerzas armadas.
Mientras tanto, el ejército de Kiev anunció el sábado que había destruido 14 de los 15 drones Shahed de fabricación iraní que Rusia había lanzado contra la región de Zaporiya, en el sureste del país, y la provincia de Dnipropetrovsk, más al norte.
Según el gobernador de Zaporiya, Yuri Marashko, Rusia llevó a cabo ese día 86 ataques aéreos contra 27 asentamientos de la provincia situados a pocos kilómetros de la zona de combate. Un civil de 82 años murió en el bombardeo, dijo Marashko.
En la vecina provincia de Kherson, el gobernador Oleksandr Prokudin informó de que una persona había muerto y otras tres habían resultado heridas por los bombardeos rusos. Las fuerzas de Moscú dispararon 25 proyectiles contra la ciudad de Kherson, a orillas del río Dnepr.
El ataque alcanzó zonas residenciales, incluidos centros de salud, instituciones educativas, establecimientos públicos de comida y bebida, instalaciones de infraestructuras vitales y prisiones, añadió Prokudin.
