Siempre me gustó escribir en plural; nunca me gustó hacerlo en singular porque me niego a presentarme como si fuera el personaje principal, como los vaqueros del oeste de Estados Unidos, como los presentaban los cinematógrafos, que serían los dueños de todos y, sobre todo, los grandes conquistadores de su país. También había, de una mujer hermosa. Ahora, después de envejecer, soy crítico de la columna que escribo para este periódico vespertino, así que debo tener cuidado, Flavia García de Gutiérrez, aunque lo hace de buena fe, me saca de mi carril de paciencia, porque a lo largo de los años ha leído obras que he escrito en orden histórico y político y todos los días mi trabajo es Exige mucho. No recuerdo mucho de eso, así que he repetido que era nuestro respeto, admiración y amor permanente por el pueblo de la República Dominicana. Aunque ahora estoy más preocupado que nunca por el futuro de nuestro país.
Esta preocupación se agudiza día a día y por la lectura de diversos medios escritos, y como seguidor permanente de noticieros televisivos que recogen estas acciones en sectores importantes de nuestro pueblo, y luego por todo tipo de delitos en los que vive la familia dominicana, entre ellos la violación sexual de niñas mayores de 10 años, y todo tipo de delitos. La violación sexual de adolescentes en todas las categorías sociales está en aumento.
No solo estamos realmente cansados de preocuparnos, sino que esa preocupación también extiende el poder judicial, con el raro ascenso de la corrupción que no es más que una apertura en el camino que nos lleva a un final dramático de la realidad de la vida.
El autor del ejemplo de dignidad absoluta que hemos luchado en su territorio, el único país de América, desde el origen del origen, comenzando por Enriquillo, admirando los episodios de este pueblo que llamamos «hermoso, productivo, rico y valiente» durante más de 50 años, los españoles, ingleses, franceses, haitianos, y no tenemos otros españoles. he estado luchando con los estadounidenses del dolor.; Pero ahora estamos de nuevo en un camino que ya pensábamos que habíamos recorrido hace muchos años.
Es cierto que la dignidad de los dominicanos, una de las expresiones que identifican y enaltecen los valores, es la única que, como pueblo de este continente, ha llevado a cabo 4 masacres. Salcedo’s Pickle 2 Ulises Heureaux (Lilith) es su tercer sencillo. Ramón Cáceres, y 4. Rafael Trujillo Molina; hombres valientes, criminales y asesinos, y en sus acciones causaron daño y causaron problemas para el país, pero para los dominicanos es una realidad que no se puede despreciar ni perdonar.
Leyendo la prensa escrita dominicana «tocada por la mano de Dios», el destino de este país nos permite producir más del 80% de lo que consumimos, porque ahora tenemos más de 200 millones de nuestras nacionalidades, mujeres y hombres que viven en los Estados Unidos, España, Italia, Francia y otros países latinoamericanos y pequeños países caribeños. Entristece, preocupa y conmueve a aquellos de nosotros que pensamos «la mano de Dios ha tocado.»Ya no necesitamos hablar del caso de Haití, que se ha convertido en un tema internacional.’.