Madrid, 19 Oct (EUROPA PRESS) -.
El 26% de las universidades cree que su nivel de transformación digital es «inadecuado y tiene suficiente margen de mejora para equipararse a otros sectores», mientras que el 74% afirma que es «adecuado y está a la altura de otros sectores institucionales y de otros sectores educativos».
Así lo refleja la encuesta ‘Cómo afrontan las universidades españolas la transformación digital’, elaborada por la Fundación CYD, que ha encuestado a 86 universidades y ha recibido respuesta de 52 de ellas.
Según la encuesta, la transformación digital es una prioridad para el 85% de las universidades, de las que el 59% ha nombrado un vicerrector y el 31% un responsable para trabajar en este proceso. El análisis de la Fundación CYD también muestra que la falta de una cultura de adaptación a las nuevas tecnologías y la necesidad de una mayor inversión son obstáculos que las universidades detectan en el proceso de transformación digital.
Según el documento, la transformación digital de las universidades se ha visto facilitada en los últimos cuatro años. En este periodo se han creado el 65% de las plazas de rector y se ha nombrado a un responsable del proceso de transformación digital.
Los principales impulsores de esta transformación son los rectores y sus equipos directivos en el 94,23% de las universidades, seguidos de la administración central y local (25%) y el personal universitario (25%).
El 75% de las universidades cuenta con una estrategia de transformación digital para toda la comunidad universitaria, el 81,25% ha fijado objetivos concretos y medibles, el 96,15% ha realizado una evaluación de sus indicadores y el 80% ha alcanzado más de la mitad de los objetivos fijados.
El 88,68% de las universidades afirma que el uso de las nuevas tecnologías ha mejorado el acceso y la gestión de la información, el 73,58% cree que las nuevas pedagogías del aprendizaje han mejorado la experiencia de los estudiantes y los resultados del aprendizaje, y el 62,26% cree que la educación en línea ha hecho más accesible la enseñanza superior.
Para la mayoría de los encuestados (74%), el nivel de transformación digital en las universidades es bueno y está en línea con el de otras instituciones y otros sectores educativos.
El informe identifica la necesidad de un cambio cultural en las instituciones para adaptarse al uso de las nuevas tecnologías (71,70%), la cantidad de inversión necesaria (66,04%) y la complejidad administrativa en la concesión de ayudas y su justificación (41,51%) como los principales obstáculos a los que se enfrentan las universidades en el proceso de transformación.
Para alcanzar un buen nivel de transformación digital, los retos identificados por la mayoría de las universidades son: mantener una inversión adecuada para continuar con esta transformación (73,56%), facilitar la adaptación de las instituciones a las nuevas tecnologías (60,38%), personal docente e investigador y personal de administración y servicios (50,94%); y promover el interés y la participación del personal de administración y servicios (50,94%).
El 88,39% del presupuesto de TI de la universidad se financia internamente, y más de la mitad (50,84%) se destina a equipos de hardware y soporte de programas y aplicaciones de software. Los gastos en licencias de software fueron inferiores a 100 000 euros (19,05%), superiores a 100 000 euros (57,14%), superiores a 1 millón de euros (14,29%) y superiores a 2 millones de euros (9,52%).
La mayoría de las aulas están equipadas con proyectores multimedia (89%) y pueden grabar y transmitir contenidos en tiempo real (69%). La proporción de ordenadores en las aulas oscila entre el 1% y el 4% de los alumnos matriculados.
El 67,65% de las universidades tiene algún tipo de acuerdo de cooperación con empresas privadas en relación con la formación de los estudiantes (65,2%), el acceso a licencias gratuitas de software (52,2%), la formación del profesorado (39,1%) y el acceso a software de gestión (39,1%).
La encuesta revela que el 79,5% de las universidades ofrece formación en competencias informáticas a sus estudiantes, tanto voluntaria (46,2%) como obligatoria (33,3%); el 79,55% ofrece nuevas formas de formación, como la enseñanza semipresencial, las tutorías en línea y las clases grabadas en vídeo; y el 77,27% analiza las necesidades de formación de los estudiantes en materia de informática. y el 77,27% analiza los datos obtenidos en las encuestas para conocer las opiniones y expectativas de los estudiantes.
El 88,64% de las universidades utiliza aplicaciones de videoconferencia y audioconferencia, herramientas colaborativas y redes sociales para interactuar con los estudiantes. La mayoría de las universidades han digitalizado casi por completo servicios como las secretarías (77,78%), las bibliotecas (69,44%) y la solicitud de documentos (80,56%).
Más del 85% también ofrecen entornos de aprendizaje electrónico y licencias de campus para que los estudiantes puedan estudiar.
Todas las universidades encuestadas ofrecen formación obligatoria (el 28% de las universidades ofrecen formación obligatoria al personal docente e investigador y el 32% al personal de servicios) y voluntaria (el 72% al personal docente e investigador y el 68% al personal de servicios) al personal docente e investigador y al personal de administración y servicios, aunque estos dos últimos menos de la mitad de los profesionales de estos grupos (44% del personal de servicios y 45,5% del personal docente e investigador) prefieren y reciben la formación voluntaria.
Para mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje a través de la digitalización, el 79,55% de las universidades ofrecen oportunidades de formación en competencias digitales, el 70,45% apoyan a los profesores en todos los aspectos técnicos y el 65,91% promueven el aprendizaje y la enseñanza digital.
