Sevilla, 19 Oct (EUROPA PRESS) -.
La familia del joven cordobés Álvaro Prieto murió electrocutado al entrar en contacto con un cable eléctrico en un taller de la estación de Santa Justa de Sevilla. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado que la familia de Prieto ha solicitado al Juzgado de Instrucción número 11 de Sevilla, encargado de la investigación de la muerte de Prieto, que se persone en las diligencias abiertas en el caso.
No fue hasta el 12 de octubre del año pasado cuando la familia presentó una denuncia por desaparición ante la Policía Nacional después de que el chico, de 18 años, pasara la noche en una discoteca de la zona este de Sevilla con otros jóvenes, perdiera el tren de madrugada a Córdoba para el que tenía billete e intentara sin éxito coger otro tren para el que no tenía billete; después, Al salir de la estación de Santa Justa, no tenía dinero para comprar otro billete y le aconsejaron que cargara su teléfono móvil, que tenía la batería descargada, para resolver la situación.
El pasado lunes por la mañana, tras varios días de búsqueda por parte de las autoridades y muchas denuncias sobre su desaparición, se encontró su cuerpo en un vagón de tren, que llevaba fijo y en movimiento en la zona de talleres de la estación de Santa Justa desde el pasado mes de agosto.
Los detalles fueron grabados por un cámara de televisión que trabajaba para el programa «Mañaneros» de TVE1 para retransmitir en directo el suceso, cuando el cuerpo fue descubierto por accidente.
En este caso, las imágenes de una cámara instalada en un local cercano al lugar donde se encontró el cadáver fueron entregadas a la Policía Nacional el domingo por la tarde y, según la Policía, un joven «subió a la parte superior del tren, hasta la intersección entre los dos vagones, se subió encima del tren e instantáneamente cayó dentro del hueco entre los dos vagones y el lunes por la mañana…». Muestra cómo «permaneció completamente oculto hasta que el tren se puso en movimiento».
Helicópteros y drones sobrevolaron la estación sin éxito, pero Pedro Fernández, representante del Gobierno central andaluz, dijo que la clave para que finalmente se viera el cuerpo sería que el tren, que llevaba atascado desde agosto, había empezado a moverse y había espacio para que otro tren se detuviera en el taller. Según sus palabras, hasta entonces había sido «absolutamente imposible» ver los cuerpos.
Según la Policía Nacional, ese día el grupo de búsqueda fue grabado por las cámaras de televisión mientras «se movía en dirección» al lugar donde se había encontrado el cuerpo del niño.
