13 Oct Madrid (EUROPA PRESS) = conjunta
Podría ser posible construir carreteras pavimentadas y pistas de aterrizaje en la superficie de la Luna utilizando rayos láser para fundir el suelo lunar y convertirlo en un material más duro y estratificado.
Esta es la conclusión de un estudio de prueba de concepto publicado en la revista Scientific Reports. Los experimentos se llevaron a cabo en la Tierra con sustitutos de polvo lunar, y los resultados muestran la viabilidad de esta tecnología y sugieren que podría reproducirse en la Luna. Sin embargo, según los autores, es necesario seguir investigando para mejorar este proceso.
El polvo lunar supone un gran reto para los vehículos lunares, ya que tiende a flotar cuando se le molesta debido a los bajos niveles de gravedad y puede dañar los equipos. Por ello, infraestructuras como carreteras y pistas de aterrizaje son esenciales para mitigar el problema del polvo y facilitar el transporte en la Luna.
Sin embargo, como el transporte de materiales de construcción desde la Tierra es costoso, es esencial utilizar los recursos disponibles en la Luna.
Los investigadores Juan Carlos Ginés Palomares y Miranda Fateri, de la Universidad de Aalen (Alemania), y Jens Günster, del Instituto Federal de Ensayo de Materiales (BAM) de Berlín, han desarrollado un material fino denominado EAC-1A (desarrollado por la ESA como sustituto del suelo lunar), que es Lo fundieron con un láser de gas para simular cómo el polvo lunar podría fundirse y volverse sólido por la radiación solar enfocada sobre la superficie lunar.
Los autores experimentaron con rayos láser de distinta potencia y tamaño (hasta 12 kilovatios cada uno y 100 milímetros de diámetro) para crear un material robusto, pero descubrieron que aparecían grietas cuando las trayectorias de los rayos láser se cruzaban o solapaban.
El equipo desarrolló una estrategia para producir formas geométricas huecas triangulares de unos 250 milímetros de tamaño utilizando rayos láser de 45 milímetros de diámetro. Los autores sugieren que estas formas entrelazadas podrían crear una superficie sólida en grandes áreas del suelo lunar que podrían utilizarse como carreteras o plataformas de aterrizaje.
Para reproducir este método en la Luna, los autores calculan que sería necesario transportar desde la Tierra una lente de unos 2,37 metros cuadrados para enfocar la luz solar en lugar de un láser. El tamaño relativamente pequeño del equipo necesario sería una ventaja para futuras misiones lunares”.
