Nueva York, 25 oct (EFE) – El expresidente estadounidense Donald Trump fue multado el 25 de octubre con 10.000 dólares tras ser llamado al estrado como testigo por un juez en el juicio por fraude que le persigue en Nueva York, después de ser amonestado y multado con otros 10.000 dólares por violar de nuevo una «orden mordaza» que le prohíbe hablar sobre su secretaria, después de que el juez le llamara a declarar.
El juez Arthur Engolon impuso la orden a Trump el 2 de octubre después de que publicara un ataque personal contra su secretaria en sus redes sociales, y el mensaje permaneció en la página web de la campaña de Trump el pasado viernes debido a un supuesto descuido, Ya ha sido multado con 5.000 dólares.
Durante la sesión de hoy, en la que declara como testigo el exabogado de Trump Michael Cohen Engolon, el juez llamó al expresidente a la sala para que hablara bajo juramento y le interrogó sobre unas declaraciones que hizo en los pasillos de la sala.
Cuando el juez le preguntó si se refería a Cohen sentado en esa silla, el expresidente respondió que sí, pero aclaró que se refería a Cohen sentado en esa silla.
Tras un breve intercambio, Trump calificó a la secretaria de «muy injusta», pero Engoron decidió que se refería de nuevo a ella, ya que había una «barrera» entre su asiento y el estrado donde estaba sentado Cohen, y en ese caso estaría pronunciando el nombre de Cohen.
«El testigo no es creíble (omisión), por lo tanto, le impongo una multa de 10.000 dólares (cifra de tendencia liberal), a pagar en un plazo de 30 días», le dijo Engoron tras excusarle, añadiendo después que no cambiaría de opinión y advirtiéndole: «No lo vuelva a hacer o será peor».
La semana pasada, un juez amenazó a Trump con penas de cárcel si incumplía repetidamente una orden que le prohibía hacer comentarios sobre los funcionarios judiciales en general.
El juicio por fraude contra Trump, sus dos hijos mayores, su empresa y dos asociados, que incluye seis cargos de conducta impropia, durará hasta mediados de diciembre. EFE’