Dahiana Fanya ofrece al conductor la hucha que está vendiendo.
Entre los cláxones, el humo y el ajetreo que caracteriza a los cruces de las principales vías de la ciudad, cuando los semáforos cambian de verde a rojo, bajo la intensa luz del sol y el asfalto caliente, una mujer discapacitada en silla de ruedas se gana la vida vendiendo huchas de plástico, moviéndose entre coches y motos sin reparar en riesgos.
No tiene vergüenza y a veces se pregunta por qué es ella y cómo habría sido su vida si su estado hubiera sido normal. Dahiana Fanya, de 37 años, se levanta a las 5 de la mañana para preparar sus quehaceres diarios, a pesar de estar atada a una silla de ruedas en lugar de a sus piernas.
Sale de su modesta casa y deja a su hijo de siete años con una amiga, desde donde se dirige a la estación de metro y se baja en la esquina de las calles John F. Kennedy y Ortega y Gasset. Así es como Dahiana pasa sus días.
En el fondo, espera que cada día sea mejor que el anterior. Pero así es la vida: sigue un curso frenético predestinado por el destino. Así es.
La enfermedad de la hidrocefalia es un infierno que sólo se puede soportar con fe y perseverancia en Dios.
Tengo hidrocefalia. Soy madre soltera, así que pido ayuda al gobierno, a las autoridades públicas y a organizaciones privadas. Doy gracias por tener una tarjeta de alimentos, pero la vida se ha vuelto muy cara y me gasto de golpe el poco dinero que tengo gracias a la venta y a los donativos de la gente», cuenta Fanya.
Hidrocefalia.
La hidrocefalia es una afección en la que se acumula una cantidad excesiva de líquido cefalorraquídeo en el cerebro. Este líquido normalmente protege el cerebro y actúa como un cojín. Sin embargo, un exceso de líquido cefalorraquídeo puede ejercer una presión perjudicial sobre el cerebro.
La hidrocefalia es una afección congénita y puede aparecer al nacer, pero también puede desarrollarse después del nacimiento y se denomina hidrocefalia adquirida. La hidrocefalia puede aparecer a cualquier edad y estar causada por un traumatismo craneal, un derrame cerebral, una infección, un tumor o una hemorragia cerebral.
Técnicos dando los últimos retoques a un proyecto de rescate de la zona de Duarte y París.
En los adultos, puede causar pérdida de control del esfínter urinario (incontinencia urinaria), cambios en la marcha, como incapacidad para caminar, y alteraciones de las funciones cognitivas, como la memoria, el pensamiento y el razonamiento.
El Estado debería ampliar las prestaciones de los regímenes de asistencia social a este tipo de personas. Hay que encontrar mecanismos para evitar que personas como Fanya tengan que mendigar en los semáforos para ganarse la vida.
Discapacidad.
El Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se celebra el 3 de diciembre, tiene como objetivo promover los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad en todos los sectores de la sociedad y concienciar sobre su situación en todos los aspectos de la vida. En la República Dominicana, sólo se habla de estas personas a través de los medios de comunicación.
Ubicación.
Al final del número 3 de la Vía de la Respaldo Josefa Blair, Capotillo. Teléfono 809.303.
