Dedicado a las Hermanas Mirabal en el 63 aniversario de su brutal asesinato.
La Hermandad Mirabal – El presidente de la Corte Suprema de Justicia (SCJ) y del Consejo del Poder Judicial (CPJ), Henry Molina, afirmó este sábado que el asesinato de las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, hace 63 años, no apaga su memoria y legado, porque el valor de su sacrificio está más vigente en la actualidad Afirmó.
Henry Molina hizo la declaración al encabezar un acto de recordación de las hermanas Mirabal y del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, establecido por la ONU para conmemorar el 25 de noviembre de 1960, asesinato de activistas contra la dictadura.
El recuerdo de la lucha por la democracia reviste hoy especial importancia. Esto se debe a que los fracasos de este sistema se utilizan a menudo para glorificar una forma anticuada y totalmente inaceptable. A menudo, los desafíos que experimentamos en democracia se perciben como un problema para la democracia.
Los actos conmemorativos organizados en colaboración con la Fundación Hermanas Mirabal incluyen una misa solemne en la parroquia de San Juan Evangelista, una misa conmemorativa en el Parque Duarte y, por último, un mausoleo en el que descansan los restos de las Hermanas Mirabal y de Manuel Aurelio (Manolo) Tavares Justo, líder del movimiento revolucionario del 14 de junio. Hubo una misa conmemorativa en la Casa-Museo de Salcedo.
El pasado jueves, el pleno del Tribunal Supremo dedicó una audiencia de juramentación de abogados a Minerva Mirabal, reconocida como jurista a título póstumo.
En 2020, la doctora Minerva Mirabal fue exequaturada póstumamente, luego de que la dictadura violara injustamente sus derechos y le impidiera ejercer la profesión que había perfeccionado. Estoy orgullosa de estar aquí y me gustaría compartir un pequeño homenaje en su memoria. Estoy orgullosa de estar aquí y me gustaría compartir un pequeño homenaje en su memoria».
También señaló que la inclusión intersectorial de la perspectiva de género en la administración de justicia es una respuesta necesaria a la persistente tragedia de la violencia de género y el homicidio femenino, y un llamado al reconocimiento colectivo nacional de la necesidad de mejorar.
Señaló que el poder judicial dominicano ha tomado una serie de acciones dirigidas a la protección de las víctimas, incluyendo el establecimiento de centros de entrevistas en todos los departamentos de justicia, la introducción de una guía de buenas prácticas en casos de violencia doméstica, familiar y sexual, el desarrollo de una política de igualdad de género, así como numerosas capacitaciones, análisis y diversos estudios sobre el tema. El informe daba cuenta de la promoción de una serie de acciones.
Minou Tavares Mirabal, de la Fundación Hermanas Mirabal, afirmó que la trayectoria transparente, vertical e incalificable de la vida de las niñas les ha dado un lugar trascendental en la historia de la democracia en la República Dominicana, y en la historia de las mujeres en todo el mundo.
A ella (Minerva) se le negó el acceso a los tribunales, lo que fue rectificado años después por la Universidad y el Estado. Agradezco una vez más a los jueces que reconocieron este derecho al inscribir su nombre en la clase de abogados que iniciaron su camino de formación jurídica bajo el ejemplo de esta heroína, y por su acto de justicia al concederle el permiso póstumo para ejercer la abogacía que ella deseaba», dijo Tavares Mirabal. Durante esta actividad, la Sra. Silvia Fernández, Jueza Honoraria de la Corte Penal Internacional, dictó una conferencia virtual sobre los derechos humanos de las mujeres y casos simbólicos en la Corte Penal Internacional, reconociendo principalmente la contribución de la República Dominicana para lograr una representación equitativa de género en la composición de los tribunales con jurisdicción penal.
Lograr la representación igualitaria de hombres y mujeres en la composición de la Corte Penal Internacional no sólo es una obligación legal contenida en el Estatuto de la Corte Penal Internacional, sino también una condición fundamental para que la Corte Penal Internacional pueda combatir eficazmente la violencia contra las mujeres.
Las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, junto con su amigo Rufino de la Cruz, fueron asesinadas a golpes por esbirros del Servicio de Inteligencia Militar (SIM), al servicio de la dictadura. Tras su vergonzoso acto, desmantelaron el coche en el que viajaban las muchachas con la excusa de un accidente de tráfico.