El presidente Luis Abinader anunció una prórroga del contrato por 30 años, hasta el 2060, que será enviada a la Asamblea Nacional.
Esta mañana, según algunos legisladores, el Poder Ejecutivo habría creado un traje a la medida para firmar un nuevo contrato con Aeropuertos Dominicanos Siglo XXI (Aerodom), promulgando una ley que permite la renegociación y modificación de contratos.
Algunos diputados de la oposición dijeron que era muy oportuno que los primeros cambios en el contrato, que llevaba siete años en vigor, se produjeran poco después de la promulgación de esta ley.
El diputado José Horacio Rodríguez recordó que cuando el proyecto se debatía en el Congreso, solicitó los contratos que el Ejecutivo pretendía modificar, pero no recibió respuesta.
En ese momento dijimos que estábamos aprobando la ley a ciegas porque no sabíamos qué contratos iban a ser modificados o actualizados. La semana pasada debíamos tener esa información en nuestras manos. Dijo que la ley se diseñó con este fin.
Sócrates Pérez, delegado del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), expuso un argumento similar, afirmando que el contrato fue modificado poco después de que se aprobara la ley de concesiones.
El contrato le beneficia a él y a sus empresarios. La ley de concesión ya había sido aprobada y parece que eso era lo que buscaban, señaló el diputado.
El diputado Hamlet Melo también criticó la renegociación del contrato, cuestionando la necesidad de renegociarlo en este momento, cuando faltan varios años para que expire.
Por ejemplo, me gustaría saber si es necesario privatizar el agua de Guibia o las playas de Punta Cana. Ahora están intentando modificar el contrato, al que aún le quedan siete años, para darles 30 años más de concesión. En otras palabras, cuál es la necesidad, criticó el Vicepresidente.
La ley del 18 de agosto de 2006 que establece medidas reglamentarias para los contratos de concesión celebrados antes de la Ley 340-06 sobre Compras y Contrataciones de Bienes, Servicios, Obras y Concesiones, que permite al Gobierno renegociar contratos anteriores que no se hicieron en el ámbito de la normativa vigente. Pretende crear esta posibilidad.
Sin embargo, su artículo 16 establece que el Gobierno puede modificar los contratos existentes y renegociar su contenido, pero si fueron aprobados previamente por el Congreso o afectan de alguna manera al Estado, se debe escuchar nuevamente la opinión del Poder Ejecutivo.
Ayer, el presidente Luis Abinader anunció que el contrato sería enviado a la Asamblea Nacional, pero hasta el miércoles aún no había llegado a ninguna de las dos cámaras.