Ciudadanos de Israel, que quede claro. Continuaremos hasta que recuperemos a todos los rehenes y logremos todos nuestros objetivos de liquidar a Hamás, declaró el primer ministro Netanyahu.
El Gobierno israelí declaró el miércoles que continuará su guerra contra los subalternos de Hamás después de que mañana jueves entre en vigor el acuerdo de alto el fuego alcanzado con el grupo islamista palestino para liberar a los rehenes a cambio de prisioneros palestinos.
Quiero dejar claro, ciudadanos de Israel, que la guerra continúa. Debemos recuperar a todos los rehenes, liquidar a Hamás y asegurarnos de que Hamás no recibe educación terrorista en Gaza ni se convierte en un refugio para terroristas».
El acuerdo con Hamás, que incluye un alto el fuego de cuatro días para liberar a 50 rehenes israelíes y 150 prisioneros palestinos, se logró mediante una combinación de esfuerzos militares y políticos para presionar a Hamás, según afirmó el Primer Ministro.
En una rueda de prensa conjunta con el ministro de Defensa, Yoav Galant, y el ex ministro de Defensa y miembro del gabinete de guerra, Benny Gantz, el primer ministro Netanyahu declaró: «Estamos aprovechando todas las oportunidades para liberar a los rehenes porque es una misión sagrada».
En su discurso, el ministro de Defensa Gallant argumentó que lo único que entiende Hamás es la fuerza, y que cuanto más fuerte sea ésta, mayores serán los resultados y las posibilidades de recuperar a los rehenes.
Según las autoridades de la Franja de Gaza, los últimos 47 días se han cobrado ya la vida de más de 14.000 palestinos, entre ellos más de 5.000 niños.
Según las autoridades de la Franja de Gaza, la guerra se ha cobrado ya la vida de 14.000 palestinos.
El Gobierno israelí acordó ayer aprobar un alto el fuego con Hamás, ya que tres ministros del Partido de las Fuerzas Judías (Otzma Yehudit), de extrema derecha, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, creen que es un error que irá en contra de Israel.
En este sentido, Benny Gantz subrayó que reconocía que el alto el fuego permitiría a la otra parte ponerse a prueba y ganar tiempo.
La decisión de ayer fue una de las más difíciles que he tenido que tomar en los 40 años que llevo sirviendo a este país y a esta guerra. Habrá muchas más decisiones de este tipo en el futuro, pero estoy convencido de que fue la correcta.